Enlaces accesibilidad
arriba Ir arriba

En la ciudad ucraniana de Dnipro, decenas de mujeres se han manifestado preguntándose "¿dónde están los soldados desaparecidos?". No conocen si se encuentran vivos, están muertos o están presos. Aseguran que hay más de 17.000 militares desaparecidos. Esta protesta ha sido muy crítica con el presidente Volodímir Zelenski y su Ministerio de Defensa. Informa Almudena Ariza, enviada especial de TVE en Dnipro.

Ucrania vuelve a mandar un mensaje de resistencia frente a Rusia y difunde las imágenes de la alegría de los combatientes ucranianos que habían sido encarcelados por Putin durante meses, al encontrarse con sus familias en Turquía, donde están protegidos.

Se trata de cinco altos mandos del batallón de Azov, que defendían la planta siderúrgica de Azovstal en la ciudad asediada de Mariúpol, y que fueron liberados en el último intercambio de prisioneros de alto nivel de septiembre. A cambio de la liberación de 200 ciudadanos ucranianos y 15 extranjeros, Ucrania entregó a un aliado del presidente ruso Vladímir Putin: el líder de la oposición ucraniana prorrusa Viktor Medvedchuk.

Decenas de vecinos en Zaporiyia cruzan una y otra vez el mismo paso de cebra para cortar el tráfico y exigir que les dejen volver a sus casas en la zona ocupada por Rusia. Llevan semanas atrapados en el lado ucraniano.

Son decenas de personas que quieren pasar al otro lado, al lado ocupado por los rusos porque es donde viven. Allí tienen sus casas o pretenden llevar ayuda a sus familiares y amigos.

Entrevista en La Noche en 24 a la investigadora del Real Instituto Elcano, Mira Milosevich, que analiza la actualidad relacionada con la guerra en Ucrania y las consecuencias de la anexión a Rusia de los territorios ocupados. Para Milosevich, la amenaza nuclear lanzada por el presidente ruso, Vladímir Putin, supone, por un lado, la debilidad interna del gobierno ruso, pero también lanza un mensaje a Occidente de que Rusia está dispuesta a alargar la guerra. 

Foto: TVE

En Zaporiyia, al sureste del país, está la central nuclear más importante de Ucrania. Fueuno de los primeros objetivos de las tropas rusas. La población de la ciudad, junto a la que está, Energodar, se defendió de la invasión como pudo. Un equipo de TVE ha hablado con el que entonces era su alcalde, Dimitir Orlov, de 37 años, quien alentaba a los vecinos a no rendirse. Hoy, es un alcalde en el exilio, desolado, y que no olvida el acto heroíco de su pueblo.

"Fueron un ejemplo de resistencia, hicieron un escudo humano, pero por desgracia, horas después, los rusos comenzaron a disparar", cuenta.

Foto: Russian Defense Ministry Press Service via AP