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Los parlamentarios británicos han arremetido contra el Gobierno de Theresa May el análisis legal sobre el Brexit porque consideran que la solución para evitar una frontera física en Irlanda liga al país indefinidamente a las normas europeas.  En el segundo día de debate sobre el divorcio, la primera ministra británica ha defendido que la Unión Europea no busca un vínculo permanente ante el rechazo de escoceses y norirlandeses, que se sienten discriminados.

  • Decenas de diputados de todos los colores pretenden convertir en acuerdo con la Unión Europea en papel mojado
  • Inspirados por distintas motivaciones, todos aspiran a acabar con el pacto entre la primera ministra y Bruselas

La primera ministra británica, Theresa May, se enfrenta este martes al examen del Parlamento en la primera de las cinco sesiones en las que la Cámara de los Comunes debatirá el acuerdo con Bruselas para el Brexit. El acuerdo será sometido a votación en el Parlamento el próximo día 11.

May pedirá a los diputados que respalden el acuerdo al que ha llegado con Bruselas a fin de asegurar un "futuro mejor" para el Reino Unido tras su salida de la UE.

La comparecencia de May viene precedida por la polémica de la difusión de un informe legal sobre el acuerdo pedido por su gobierno. May ha rehusado publicar el informe legal completo, algo a lo que estaba obligado por una moción aprobada en la Cámara días atrás.

El Partido Laborista y otras cinco formaciones políticas han instado al presidente de la Cámara de los Comunes, John Bercow, a iniciar una investigación contra May por "desacato" al Parlamento. Bercow ha reconocido que existe base para esa acusación.

Miramos ahora hacia Europa para conocer al detalle las decisiones de la cita que ha reunido a los ministros del Transporte de la Unión. En su acta, varias normas que afectarán a los camioneros que circulen por los países miembros y también una novedad respecto al cambio de hora: todos han acordado aplazar la decisión de mantenerlo o eliminarlo.

La primera ministra británica, Theresa May,  continúa la campaña para conseguir los apoyos de los grupos parlamentarios al acuerdo del Brexit.  Este jueves ha pedido a los diputados que se centren en el texto durante una comparecencia parlamentaria, mientras que el negociador jefe de la Unión Europea, Michel Barnier, ha advertido de que el pacto no podrá ser renegociado.