Como si saliese un hongo de la tierra, la explosión formó una gran nube que ha recordado a la que generan las bombas atómicas. Aunque según los expertos no son comparables porque las nucleares llevan partículas radioactivas, la explosión de Beirut ha provocado unos efectos devastadores y una huella que tardarán mucho tiempo en borrar.
Beirut intenta resurgir, una vez más, de sus cenizas. Una ciudad que sigue conmocionada por los efectos de la explosión, que se suma a la crisis del coronavirus y que, como temen muchos, hará más profunda la crisis económica que vive el Líbano desde hace años. Los hospitales, que ya estaban sobrecargados por el coronavirus, no dan abasto y se ha declarado el estado de emergencia en Beirut.
- La ONG de derechos humanos Human Rights Watch (HRW) alega falta de confianza de los libaneses en el Gobierno
- La investigación internacional deberá determinar las causas y responsabilidades para evitar que se repita
- Los equipos de rescate continúan buscando al centenar de desaparecidos bajo los escombros de la explosión
- El Gobierno calcula que las pérdidas por daños materiales oscilarán entre los 3.000 y los 5.000 millones de dólares
Beatriz Navarro, directora de Acción Contra el Hambre en Líbano ha expresado en Las mañanas de RNE con Íñigo Alfonso su preocupación por la situación en Beirut tras las dos explosiones en el puerto que han dejado 135 muertos y más de 5.000 heridos. Francia ha sido el primer país en reaccionar, Macron llega este jueves a la capital además de enviar ayuda. Una misión polivalente para buscar víctimas y apoyarlas. Hablamos, dice, de un país con un elevado número de refugiados con tres hospitales inservibles. Toda la actividad del puerto por donde entra el 80% de los productos se ha trasladado al de Trípoli. También nos comenta que no se ha establecido riesgo químico, lo peor es la salud mental.
Hoy se cumplen 75 años del ataque sobre la ciudad japonesa de Hiroshima en la II Guerra Mundial. La ciudad fue víctima del primer holocausto nuclear de la historia de la humanidad. En torno a 300.000 personas murieron por el efecto de la bomba atómica.
Estados Unidos la lanzó a las 8.15 de la mañana del 6 de agosto de 1945 y hoy, a esa hora, se ha tocado la simbólica campana de la paz de la ciudad. El alcalde de Hiroshima ha insistido, en el acto para recordar a las víctimas, en la importancia de que Japón firme elTratado Sobre la Prohibición de Armas Nucleares aprobado hace tres años en la ONU. Sólo 40 países lo han ratificado y hacen falta diez más para que entre en vigor.
Informa Javier Álvarez
- El alcalde de la ciudad ha pedido al Gobierno japonés que firme el Tratado sobre la Prohibición de las Armas Nucleares
- La ceremonia se ha desarrollado con un número menor de participantes para evitar contagios por la pandemia de coronavirus
- Se cumplen 75 años del bombardeo atómico de Japón, que posibilitó el final de la Segunda Guerra Mundial
- El armamento nuclear provocó la guerra fría y cambió para siempre las relaciones internacionales
- Un cargamento de 2.750 toneladas de nitrato de amonio, sin custodiar, fue la causa de la deflagración en el puerto
- Más de 200.000 personas han perdido sus casas y los daños podrían ascender a 5.000 millones de dólares
Un segundo, eso tarda en cambiar la vida. Un instante y lo que era de un color vira a otro y nada es como era justo antes del último pestañeo... La feliz foto de novia en mitad de la calle. Una entrevista por skype de una reportera de la BBC. Una misa. O el camino al paritorio. La terrible explosión del puerto de Beirut ha supuesto un antes y un después para la capital libanesa.
Cuando Luca revisa en su móvil las imágenes de la explosión en Beirut, aún no puede creer que esté a salvo. Estaba en su casa, a un kilómetro de la explosión. Su casa está destrozada y recuerda que quedó "paralizado" por el miedo, porque creía que estaba cayendo una bomba. Otros como Mohammad, describen una ciudad llena de tristeza y destrucción.
Veinticuatro horas despúes, el balance tras la explosión en Beirut es desolador: más de 100 muertos y 5.000 heridos. Los hospitales, también dañados, están saturados. Hay decenas de desaparecidos y más de 250.000 personas que se han quedado sin hogar. Las primeras hipótesis hablan de una negligencia en el almacén del puerto que contenía 2.700 toneladas de nitrato de amonio, utilizado para fabricar fertilizantes o bombas.
- La tristeza se ha apoderado de la capital libanesa tras la explosión que provocó un centenar de muertes y más de 5.000 heridos
- Los equipos de emergencia trabajan a contra reloj, los hospitales están saturados y los ciudadanos, traumatizados
El video muestra a una novia posando cerca del Hotel Le Gray en el centro de Beirut en el día de su boda, justo antes de la terrible explosión que sacudió la capital libanesa.
La brutal deflagración deja hasta el momento más de 135 muertos, 5.000 heridos y decenas de miles de personas sin hogar. Un cargamento de nitrato de amonio de 2.750 toneladas sin custodiar causó la explosión, según el primer ministro libanés.
El Gobierno del Líbano ha puesto bajo control militar la ciudad de Beirut a raíz de la explosión en el puerto de cerca de 3.000 toneladas de nitrato de amonio en un almacén. El Ejército se encargará de mantener bajo arresto domiciliario a los responsables de seguridad y almacenamiento del puerto desde el año 2014, fecha en la que se depositó el fertilizante.
El nitrato de amonio llevaba desde hace seis años en un almacén sin ningún tipo de seguridad, según las primeras informaciones difundidas por el Gobierno. El número de fallecidos por la explosión se eleva a 135 y el de heridos a 5.000. Continúan las labores de rescate de más personas desaparecidas. Cerca de 300.000 habitantes de Beirut se han quedado sin vivienda.
La Fiscalía de París ha abierto una investigación al conocer que 21 de los heridos son de nacionalidad francesa. Informa Víctor Paredes.
- El país encara la desvastadora explosión tras una etapa marcada por el colapso de las instituciones
- El Banco Mundial estima que el 50% de la población de Líbano se encuentra bajo el umbral de la pobreza
La Gran Muralla China estos meses ha estado más sola que nunca. Ha reabierto pero apenas recibe visitantes porque los protocolos de seguridad obligan a limitar el aforo y no hay turistas por el cierre de fronteras.
Tik Tok, la aplicación china para compartir vídeos cortos que arrasa entre los más jóvenes, está en el punto de mira del Gobierno de Estados Unidos. El presidente Trump ha amenazado con prohibirla, a no ser que Microsoft u otra compañía estadounidense compren parte de la empresa. Tik Tok es un bocado jugoso: maneja datos de 100 millones de usuarios en Estados Unidos.
Japón, el único país que ha sufrido un ataque nuclear, se prepara para conmemorar el 75 aniversario de las bombas que devastaron Hiroshima y Nagasaki, un recuerdo que continúa atormentando a miles de sobrevivientes que siguen clamando por la abolición de las armas atómicas.