Las tropas ucranianas recuperaron el pasado 3 de octubre el pueblo de Osokorivka, en Jersón. Un equipo de TVE se ha encontrado sobre el terreno un 'pueblo fantasma'. Como otras localidades de la región de Jersón, las tropas rusas lo ocuparon al inicio de la invasión y la mayoría de los 2.000 habitantes se marcharon. Ahora quedan aproximadamente 60 personas que aseguran que pasaron meses duros, pero que ahora están más tranquilos, conscientes, eso sí, de que la amenaza todavía persiste al otro lado del río Dniéper.
Foto: EFE/EPA/HANNIBAL HANSCHKE
Kiev es una ciudad de edificios altos, donde el ascensor es un elemento imprescindible, pero ahora los continuos cortes de luz pueden convertirlo en una pesadilla. Para evitarlo, han empezado a popularizarse los kits de supervivencia por si alguien queda atrapado en él. Como el que prepara Taras. Lo primero, una linterna. Luego corta una esterilla para fabricar un asiento improvisado, valerianas para mantener la calma y, si no es posible, bolsas para vomitar. Y si hay niños, algo con lo que puedan entretenerse.
"Incluso en estas circunstancias tan dramáticas, la gente quiere ayudar a los demás", dice Liudmila, la esposa de Taras. "No se nos pasa por la cabeza que alguien pueda robarlo". "Ahora charlamos más. En el portal, en el ascensor...", dice Oksana, que coincide en la idea de que, paradójicamente, esta terrible guerra les ha hecho mejores vecinos.
La amenaza nuclear sigue latente en un conflicto que ha entrado ya en su noveno mes. La contraofensiva Ucraniana sigue ganando terreno, pero también Moscú ha reforzado su despliegue militar en las provincias ocupadas y los combates se multiplican. En el frente de Jersón, recuperar terreno significa descubrir cómo ha sido la vida bajo la ocupación. En este pueblo, la escuela se convirtió en trinchera y su sótano en el dormitorio de 200 soldados rusos. Rusia pierde terreno, pero está muy lejos de rendirse.
En la ciudad de Balakliya, al sur de Járkov, han encontrado los restos de una base abandonada. El ejército ruso se habría apoderado de un complejo de reparación de automóviles cuando entraron en la ciudad, a principios de marzo.
En ella se han encontrado una gran cantidad de documentos relacionados con el desarrollo de la contienda. Destaca un cuaderno escrito a mano por un oficial desconocido en el que figuran coordenadas de la inteligencia militar rusa.
En las instalaciones, destruidas casi por completo, retuvieron a varios ucranianos, civiles y militares. Los supervivientes hablan de tortura y terror. Por su parte, Rusia no se ha pronunciado al respecto.
Mientras sigue la evacuación de ciudadanos de Jersón hacia Rusia, las autoridades prorrusas de la región instan a todos los civiles a salir inmediatamente de la ciudad. La destrucción de infraestructuras energéticas a las puertas del invierno preocupa a la ONU porque expone a millones de personas a penurias extremas. EE. UU. acusa a Irán de desplegar en Crimea a expertos miltares en ataques con drones. La ONU y la OTAN denuncian que vulnera los acuerdos del Consejo de Seguridad. Teherán y Moscú niegan que los aparatos sean iraníes.
Foto: Civiles evacuados de Jersón (EFE/EPA/STRINGER)
