"Caos en el ayuntamiento de Roma", rezan las portadas de la capital italiana. La primera acaldesa de la ciudad eterna hace historia pero choca contra la peculiar idiosincrasia de esta histórica ciudad. La abogada Virginia Raggi, del Movimiento 5 Estrellas (M5S) ganó con un 67,15% de los votos. Una gran victoria para la formación de Beppe Grillo que arrebató la capital italiana al Partido Demócrata (PD) del primer ministro Matteo Renzi.
Pero una cosa es ganar Roma y otra domarla. Tres meses después del éxito, las dimisiones hacen tambalear el gobierno de Raggi, y un golpe doloroso: una de sus colaboradoras de confianza está bajo investigación judicial. Todo previsible en la península latina, salvo que la formación de Raggi se erige en adalid contra la corrupción y este asunto les desfonda frente a la opinión pública porque no retiran el apoyo a la investigada. "Armageddon de 5 Estrellas", califica el lío la edición italiana del Huffington Post.