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Se entiende por eurobonos los títulos de deuda respaldados por todos los países miembros de la zona euro. De crearse, desaparecerían las emisiones de deuda de cada estado miembro. Es decir, que ni España ni Francia ni Finlandia harían ya subastas de letras a tres meses o de bonos a cinco años. Para que salgan adelante tendría que haber más integración en la Unión Europea. Las economías de los 17 países miembros de la moneda única deberían tener una política fiscal común dictada por un Ministerio de Finanzas supranacional. Además, se tendría que crear una agencia de deuda europea que gestionara la emisión de bonos. Las primas de riesgo desaparecerían tal y como las entendemos ahora. En estos momentos, la prima de riesgo es el diferencial del bono a 10 años de cualquier país con el de Alemania. Según Juan Ignacio Crespo, analista económico, se compararía el bono europeo a 10 años con el bono de Estados Unidos.

El analista económico Juan Ignacio Crespo analiza en La Tarde en 24 horas la situación económica actual. Explica qué son los eurobonos y porqué esta medida evitaría la especulación. Sobre la videoconferencia que mantendrán Merkel, Sarkozy y Papandreu sobre la situación en Grecia, no espera que presenten una solución definitiva. Respecto a la posible ayuda de los países emergentes a la Unión Europea, Crespo cree que son simplemente "noticias calmentes" ante las últimas turbulencias.

La agencia de calificación de riesgos Fitch Ratings ha rebajado la nota a cinco comunidades autónomas: Andalucía, Canarias, Región de Murcia, Comunidad Valencia y Cataluña ante el "fuerte deterioro fiscal" registrado en los últimos años y que han provocado grandes incrementos en sus niveles de deuda. En este sentido, la agencia se ha remitido a los datos ofrecidos por el Ministerio de Economía hace seis días, cuando anunció que el déficit de las CC.AA. ha alcanzado el 1,2% del PIB presupuestado, cerca del límite del 1,3% marcado para todo el año, y desgranó que los ingresos de las mismas habían caído un 3,59% durante el primer semestre.

La agencia de calificación de riesgos Fitch Ratings ha rebajado la nota a cinco comunidades autónomas: Andalucía, Canarias, Región de Murcia, Comunidad Valencia y Cataluña ante el "fuerte deterioro fiscal" registrado en los últimos años y que han provocado grandes incrementos en sus niveles de deuda. Un alto funcionario del Fondo Monetario Internacional (FMI) señala que España e Italia están "haciendo mucho" para hacer frente a los problemas de sus finanzas públicas y sus deudas, pero cree que necesitarán apoyo internacional para evitar el contagio. Mientras, la Bolsa española mantiene las subidas.

El presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, ha anunciado ante el pleno de la Eurocámara que presentará "pronto" opciones para introducir los eurobonos. No obstante, ha aclarado que la emisión de deuda respaldada por todos los países de la eurozona no constituye una "solución inmediata" a la actual crisis porque "llevará tiempo". La prioridad ahora, ha sostenido Barroso, es que Grecia cumpla el plan de ajuste al que se ha comprometido y que el resto de Estados miembros ratifiquen en septiembre el acuerdo del 21 de julio para flexibilizar el fondo de rescate de 440.000 millones, de forma que pueda comprar bonos en los mercados secundarios.

El vicepresidente del gobierno balear y consejero de Economía, Josep Ignasi Aguiló, afirma que la situación económica de las islas "exige" el plan de ajuste puesto en marcha por el presidente Bauzá. "Es muy riguroso porque la situación lo exige", explica. El paquete de medidas contempla la eliminación de los 89 liberados sindicales institucionales y de las subvenciones procedentes del Fondo de Acción Sindical. Para Aguiló, estos recortes no ponen en peligro la acción sindical, que, a su juicio, se podrá llevar a cabo sin problemas (14/09/11).

Encontrar el camino correcto, una fórmula satisfactoria para todos porque una eventual quiebra griega tendría "severas consecuencias" para todos. Lo ha dicho Angela Merkel después de reunirse con el primer ministro finlandés, uno de los más escepticos con Grecia. Tanto que pidieron garantías extra a Atenas. Frente a todos los rumores, el vicepresidente de la Comisión Europea, Joaquín Almunia, califica de irresponsables a los que siguen hablando de suspensión de pagos en Grecia.

Los examinadores de la 'troika' -Comisión Europea, Banco Central y FMI- han retrasado hasta el lunes su visita a Atenas prevista para el miércoles. Mientras, Bruselas ha enviado a otro equipo para reorientar al gobierno griego sobre cómo utilizar mejor el dinero de las ayudas.

Otro punto caliente es la economía italiana. Europa confía en el plan de ajuste de Berlusconi. Fundamental -dicen Van Rompuy y Barroso- para garantizar la estabilidad y supervivencia de la Eurozona. Y a otro de los paises rescatados, a Portugal -que ya ha recibido un nuevo tramo de ayuda-, Bruselas y el FMI le piden más esfuerzo: nuevas medidas para ahorrar otros 1.000 millones de euros.

Europa y Atenas buscan una solución para evitar que Grecia se declare en quiebra. El Gobierno griego sigue esforzándose en tomar medidas de última hora para tapar agujeros financieros y, de paso, convencer a sus socios europeos y al Fondo Monetario Internacional (FMI) de que hace lo posible para reducir el déficit y de que el país aún puede salvarse de la bancarrota. Mientras, los líderes de la Unión Europea en general, y Angela Merkel en particular, sacan la cara por Atenas, y subrayan una y otra vez que Grecia no caerá. En busca de nuevas soluciones la canciller alemana, el presidente francés y el primer ministro griego se reunirán este miércoles mediante una videoconferencia. En esa política de mostrar que hace los deberes para recortar gastos, el Ministerio de Finanzas de Grecia ha ordenado este martes a 151 empresas con participación estatal reducir sus plantillas en un 10%. En total, unas 20.000 personas.

El primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, ha tratado de nuevo de calmar a los mercados en un fugaz y polémico viaje a Bruselas y Estrasburgo en el que logró palabras de confianza de los dirigentes de las instituciones europeas en una nueva jornada turbulenta para la economía italiana, cuya prima de riesgo ha subido hasta los 390 puntos básicos. Tanto en Bélgica como en Francia, el mandatario italiano ha restado peso a la zozobra de la economía de la república al señalar que "el problema no es de Italia sino de la credibilidad europea" y que la bases económicas de su país son "muy buenas". "El déficit público es el segundo más bajo de la UE tras el alemán, las familias italianas están ahorrando y las empresas conteniendo su déficit", ha asegurado.