Policías federales han evitado con cargas que manifestantes derribaran la estatua situada frente a la Casa Blanca de Andrew Jackson, presidente de Estados Unidos entre 1829 y 1837, en el marco de las protestas raciales que sacuden el país. Los manifestantes habían colocado ya cuerdas y cadenas en la estatua ecuestre cuando los policías dispersaron la protesta haciendo uso de gases lacrimógenos. La estatua de Jackson se erige en el parque Lafayette, epicentro de las protestas raciales en Washington por su ubicación, justo enfrente de la residencia que ocupa Donald Trump.
Las protestas contra el racismo sistémico tras la muerte de George Floyd siguen salpicando los Estados Unidos. La la petición de retirada o el intento de derribo de estatuas afecta a distintas ciudades y estados, que piden una revisión histórica de personajes con un pasado racista.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha congelado los visados profesionales y las 'green cards' hasta fin de año, una decisión que puede afectar a más de medio millón de personas. Trump asegura que los trabajadores extranjeros son una "amenaza" para los estadounidenses en medio de la crisis por la pandemia del coronavirus. [Coronavirus: última hora en directo
La ciudad de Nueva York ha comenzado a recuperar el pulso poco a poco este lunes, con el inicio de la Fase 2 del plan de desescalada de las autoridades del estado. Oficinas, terrazas, peluquerías y comercios han vuelto a abrir con medidas de distanciamiento social, las oficinas lo han hecho con el 50 % de su capacidad y muchas tiendas permanecen cerradas de momento. [Coronavirus: última hora en directo
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, no consiguió llenar su mitin en Tulsa a pesar de que había estado presumiendo previamente de que contaba con cerca de un millón de conformaciones de asistencia al acto de campaña. El escenario, con capacidad para 19.000 personas, tuvo que ser desmontado. Se piensa que muchos de los usuarios que pidieron sus entradas lo hicieron por una artimaña organizada en la plataforma de redes sociales TikTok.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha retomado este sábado sus mítines de cara a las elecciones de noviembre salpicado de polémica al asegurar que pidió que se frenaran los test para reducir los casos de coronavirus que ya superan los dos millones de afectados y las 119.000 muertes en el país. Durante su intervención, el presidente estadounidense también ha arremetido contra el aspirante demócrata Joe Biden al que ha acusado de ser una "marioneta" de la "izquierda radical". "Los demócratas quieren llenar los tribunales de extremistas", ha añadido Trump.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha retomado este sábado su campaña electoral de cara a la cita de noviembre con un mitin en Tulsa, Oklahoma. Trump, que no llenó el pabellón donde se celebró el acto, criticó los excesos de las recientes protestas antirracistas y defendió su gestión del coronavirus. En su defensa, admitió que pidió que se frenaran los test para reducir los casos de coronavirus que ya superan los dos millones de afectados y las 119.000 muertes en el país.
Primer acto electoral del presidente norteamericano Donald Trump en Tulsa, en el estado de Oklahoma. Un acto con el que no ha logrado una respuesta masiva, se ha quedado por debajo de lo que los pero por debajo de lo que los responsables de campaña habían anunciado. Tuvieron que desmantelar la tribuna exterior y anular las palabras que iba a pronunciar allí y solo lo hizo en el interior ante miles de sus seguidores y huecos libres. Esto siembra las dudas ante su posible reelección. El presidente estadounidense se erigió en su discurso como el representante del partido de la ley y el orden. Informa Fran Sevilla.
Con la pandemia del coronavirus aún golpeando y después de varias semanas de manifestaciones contra el racismo, el presidente Donald Trump tiene garantizado un aforo lleno en un acto de campaña en Tulsa, Oklahoma para impulsar su reelección. El inquilino de la Casa Blanca que ha sido criticado por su gestión frente al coronavirus, ha hecho firmar a los asistentes una declaración en la que se compreten a no demandar a la su equipo electoral si resultasen contagiados. También se cierne sobre él otro amenaza, la del libro de su ex asesor de seguridad nacional que saldrá a la venta en los próximos días, un juez no ha querido admitir la petición del Trump de paralizar esa publicación, en la que se describe al millonario presidente como corrupto e incompetente.
Este año, la fiesta que conmemora el fin de la esclavitud en EEUU ha tenido una incidencia muy especial. Coincide con la cuarta semana consecutiva de protestas contra el racismo. Las marchas y concentraciones han tenido un aire festivo y a la vez reivindicativo, en recuerdo a la muerte de George Floyd.
Los activistas han pedido que la celebración del fin de la esclavitud se convierta en una fiesta tan importante como el 4 de julio. Han vuelto a rodar estatuas de hombres que defendieron la esclavitud y de líderes confederados. En algunos casos, los alborotadores no se conformaron con derribarlas. En Washington, prendieron fuego a la efigie de un general sudista y en Carolina del Norte hasta simularon un ahorcamiento.
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Las manifestaciones por la celebración del 'Juneteenth' en Estados Unidos han estado marcadas este año por las reivindicaciones del movimiento 'Black Lives Matter', surgido tras la muerte de George Floyd a manos de un policía blanco. La celebración conmemora que el 19 de junio de 1865 miles de esclavos negros fueron liberados en Texas, el último estado que practicaba la esclavitud.
Donald Trump retoma su campaña a la reelección en noviembre con un mitin en Tulsa (Oklahoma), una ciudad muy marcada históricamente por las tensiones raciales. El temor a posibles incidentes entre manifestantes contra el racismo y seguidores de Trump y el riesgo de rebrote son los dos elementos que marcan este mitin. El presidente estadounidense ha calentado los ánimos con un mensaje en sus redes sociales en el que insulta a los manifestantes y amenaza con actuar contra ellos si se dan situaciones de tensión. Informa Fran Sevilla, corresponsal en Washington.
Estados Unidos conmemora este viernes el Juneteenth o aniversario de la emancipación de la comunidad negra en un momento en el que esta efeméride cobra más relevancia que nunca: el país sufre la mayor tensión racial de las últimas décadas marcada por los casos de George Floyd y Rayshard Brooks, que murieron a manos de policías, acusados ya formalmente de asesinato. Las protestas se repiten también en Tulsa, donde Donald Trump dará mañana su primer mitin tras la crisis sanitaria. En 1921 la ciudad fue escenario de uno de los actos más violentos contra la comunidad afroamericana desde la abolición de la esclavitud, en el que grupos de blancos atacaron un barrio negro y destrozaron unos 1.200 hogares.
