La democracia española ha tenido cinco presidentes del Gobierno. Zapatero es el quinto y, en cada caso, el momento de anunciar y dejar la primera fila de la política ha sido diferente.
Adolfo Suárez dimitió en un discurso televisado. Cedió el poder a Calvo Sotelo, que nunca se enfrentó a las urnas. Cedió el cargo de presidente y líder de la UCD a Leopoldo Calvo-Sotelo, que gobernó durante 2 años pero nunca se enfrentó a las urnas. Cuando faltaban 6 meses para las elecciones, renunció al liderazgo del partido y propuso a su vez como candidato a Landelino Lavilla
Felipe González ganó cuatro elecciones, hasta que, después de catorce años como presidente, perdió frente a Aznar por 300mil votos. Un año después, en un congreso del psoe, renunció a la secretaría general y apoyó para relevarlo al frente del partido a Joaquín Almunia.
Antes incluso de llegar a la Moncloa Aznar ya había dicho que sólo sería presidente durante 8 años, y cuando faltaban seis meses para el final de su segunda legislatura, designó a Mariano Rajoy como candidato popular.
Rodríguez Zapatero es el primero que, al anunciar que no volverá a optar a la presidencia, abre un proceso interno de primarias para que las bases elijan al nuevo candidato.