El Comité Internacional de la Cruz Roja ha reconocido que la amplitud del conflicto armado en Siria ha alcanzado tal gravedad que puede considerarse como una guerra civil. El ejercito ha bombardeado hoy un barrio de Damasco y mantiene el asedio de Homs.
Nueva masacre de civiles en Siria. La peor, según los grupos rebeldes, desde que empezó la revuelta. 200 muertos en solo una noche. Ha ocurrido en Tremseh. Primero hubo bombardeos y después, según los rebeldes, fuerzas del régimen han ejecutado a decenas de personas.
150, más de 200. Son cifras facilitadas popr los opositores sirios sobre el numero de muertos en Treinsa, en la provincia de Hama, en el centro del país. Cientos de personas más estarian heridas.
El Consejo de Seguridad de la ONU debate una resolución que incluiría un ultimátum al presidente sirio para que ponga en marcha el plan de paz de Kofi Annan. El régimen de Damasco ha sufrido un duro golpe con la primera deserción del embajador en Iraq, mientras en el país continúan los combates. Al menos 23 personas habrían muerto en un ataque contra un autobús. En la arena diplomática la cuestión sigue estancada. Desde un principio Rusia se ha opuesto a la iniciativa que el Reino Unido, Estados Unidos y Francia para que el Consejo de Seguridad imponga sanciones a Damasco si el régimen no detiene la violencia en un plazo de 10 días. La razón: ese texto hace referencia al capitulo siete de la Carta de la ONU, que permite el uso de la fuerza. Algo que el Kremlin, de momento, no está dispuesto a consentir.
El presidente sirio, Bashar al Assad, sigue perdiendo apoyos entre los altos cargos de su régimen. El último en desertar ha sido su embajador en Iraq, que ha llamado al ejército de su país a unirse "a la revolución", ha dicho. Mientras, el Consejo de Naciones Unidas sigue muy dividido sobre si su próxima resolución sobre Siria debería incluir sanciones.
Ya son más de 100 mil los refugiados que han huido de la violencia en Siria, según la ONU. Hoy, en París, un centenar de representantes de la comunidad internacional han prometido aumentar la ayuda al pueblo sirio y castigar a los responsables de la represión.
Los "Amigos del pueblo sirio" se reúnen este viernes en París en un nuevo intento de obligar a Bachar Al Asad a que acepte un órgano de gobierno transitorio que abra en el país un nuevo periodo político. A la reunión asisten representantes de un centenar de países, entre los que están los europeos, EE.UU y numerosos estados árabes. Pero tiene dos ausencias notables: la de China y Rusia, principales aliados del régimen sirio. El presidente francés, François Hollande, ha abierto este encuentro, el tercero en el que se intenta encontrar una solución a los 16 meses de violencia. Hollande ha justificado esta reunión por la situación dramática que se vive en Siria, que requiere de la movilización de la comunidad internacional.