En la ciudad de Balakliya, al sur de Járkov, han encontrado los restos de una base abandonada. El ejército ruso se habría apoderado de un complejo de reparación de automóviles cuando entraron en la ciudad, a principios de marzo.
En ella se han encontrado una gran cantidad de documentos relacionados con el desarrollo de la contienda. Destaca un cuaderno escrito a mano por un oficial desconocido en el que figuran coordenadas de la inteligencia militar rusa.
En las instalaciones, destruidas casi por completo, retuvieron a varios ucranianos, civiles y militares. Los supervivientes hablan de tortura y terror. Por su parte, Rusia no se ha pronunciado al respecto.