Antes de reparar los daños provocados por los ataques rusos en Ucrania, se recogen datos para investigar posibles crímenes de guerra. En este trabajo colaboran agentes españoles. Un equipo de guardias civiles y policías españoles documenta los daños sufridos en una central eléctrica de Kiev para que puedan comenzar los trabajos de reconstrucción. Estos grupos colaboran con la Fiscalía ucraniana, en respuesta al apoyo solicitado por la Corte Penal Internacional.
Foto: Un edificio bombardeado en Krivói Rog (AP Photo/Evgeniy Maloletka)
El libro 'Estación Ucrania. El país que fue', de Borja Lasheras, retrata cómo era Ucrania antes de que comenzara la invasión rusa. Lo hace a través del análisis de sus historia, sus lugares y sus habitantes. Hablamos con su autor, investigador principal del Center for European Policy Analysis, para conocer mejor un país con una convulsa historia que lucha por recuperar el pulso que teniá antes del 24 de febrero.
La guerra en Ucrania se asoma ya al invierno contemperaturas bajo cero que pueden condicionar el avance del conflicto. Además, las denuncias internacionales se multiplican. El gobierno ucraniano considera que el último informe de Naciones Unidas sobre crímenes de guerra cometidos por Rusia avala lo que venían denunciando desde que comenzó el conflicto.
El documento de la ONU abarca desde el 24 de febrero hasta el 6 de abril y asegura que se han cometido al menos 441 asesinatos, de los que más del 80% eran a hombres, pero también habría numerosas mujeres y niños. El escenario de esos crímenes es principalmente la región de Kiev, en especial Bucha y Borodianka pero también en la región de Sumy y Chernígov.
Rusia ha lanzado el mayor ataque de drones con misiles contra Kiev de las últimas semanas. No ha habido heridos, pero parece dejar claro que no habrá tregua en Navidad. Lo que sí parece inminente es el anuncio de Estados Unidos del envío a Ucrania de baterías antimisiles Patriot.
Las autoridades ucranianas aseguran que han derribado la mayoría de los 11 drones de fabricación iraní que han atacado este miércoles en Kiev. Aunque el ataque iba dirigido contra las infraestructuras de la ciudad, estas no han sido dañadas. El ministro de Asuntos Exteriores, Dmytro Kuleba, ha advertido de que Rusia podría estar preparando una gran ofensiva para comienzos de 2023.