Antes de las dos de la tarde los principales candidatos a la Xunta habían ejercido su derecho al voto. Acompañados de familia, amigos o colaboradores, coinciden en llamar a la participación.
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Los candidatos de las elecciones gallegas del próximo domingo y los líderes nacionales se han volcado este viernes en el último día de campaña. Todos han llamado a la movilización. El PP, para que el “separatismo” no gobierne, y la izquierda, para lograr un “cambio histórico”.
La candidata de Podemos a la Presidencia de la Xunta de Galicia, Isabel Faraldo, se ha mostrado "convencida" este lunes de que su partido obtendrá representación en las elecciones del próximo 18 de febrero: “Nuestra radicalidad democrática será capaz de atraer un voto a la izquierda del PP”, ha señalado en una entrevista en La Hora de la 1 de TVE.
Pese a que los sondeos pronostican que la formación morada no obtendría representación, Faraldo ha insistido en que "no les preocupa nada" porque "las encuestas han demostrado en otros procesos que son más tendenciosas que otra cosa". Así, ha vuelto a reivindicar a Podemos como "la fuerza transformadora y valiente", que "dice lo que otros callan", como la puesta en marcha de la llamada tasa Ortega -en referencia al fundador de Inditex, Amancio Ortega- para que "los que más tienen, más paguen". Según sus cálculos, se podrían recaudar anualmente 1.600 millones de euros y destinarlos a "la sanidad, la educación pública, la investigación, el empleo...".
Preguntada por cuál sería la primera medida que tomaría si llega a la Xunta, ha respondido: "Personal, personal y personal para la sanidad pública". En su opinión, "no podemos seguir dejando golpear la sanidad pública", ya que "está en la UCI y está costando vidas".
Sobre la información de que el PP "estudió" durante 24 horas la legalidad de la ley de amnistía y que el partido estaría dispuesto a un indulto condicionado a Carles Puigdemont siempre y cuando se cumplan unas condiciones, Faraldo ha señalado al candidato del PP, Alfonso Rueda, por "tratar de meterlo en la campaña electoral de Galicia". A su juicio, por dos motivos: "escaparse de los problemas reales de los gallegos y las gallegas" y "apoyar la carrera presidenciable del líder del PP, Alberto Núñez Feijóo".
