Enlaces accesibilidad
arriba Ir arriba
  • Los líderes europeos multiplican sus contactos para tratar la crisis de la deuda
  • España, en el centro del escenario por ser la mayor preocupación de la eurozona

El ministro de Economía y Competitividad, Luis de Guindos, ha dicho que la intervención del Banco Central Europeo (BCE) en los mercados para aliviar las presiones sobre la deuda española debe ser contundente y no tener de antemano fijado un límite ni de cuantía ni de duración.

El ministro de economía asegura que hay contactos entre el gobierno de España y las instituciones europeas para acordar la forma en la que el Banco Central Europeo podría comprar deuda española. En declaraciones a la agencia EFE, Luis de Guindos sostiene que esa intervención no debería tener límite ni de cuantía ni de duración.

  • Berlín solo quiere control sobre los 25 mayores bancos de la eurozona
  • París prefiere que se supervise a todos los bancos de los 17 países del euro
  • Las entidades bancarias regionales alemanas no se han sometido a los test de estrés
  • La Comisión Europea presentará su propuesta el 11 de septiembre

El ministro de Exteriores de Finlandia, Erkki Tuomioja, indicó que su país debe estar preparado para una posible ruptura de la zona del euro, en una entrevista que hoy publica el diario británico 'The Daily Telegraph'.

El producto interior bruto de los países del euro retrocedió 2 décimas en el segundo trimestre del año, y 4 si se compara con el año pasado. La economía española pierde un 0,4% entre abril y junio; los datos de Alemania y Francia son mejores de lo esperado.

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha insistido este martes, tras despachar con el rey en Mallorca, que el Gobierno no ha tomado aún ninguna decisión sobre si pedirá un rescate al país y que no la tomará hasta saber qué va a hacer el Banco Central Europeo. El jefe del Ejecutivo ha subrayado que no ha habido "ninguna novedad" desde la última rueda de prensa que dio el pasado 3 de agosto, cuando no descartó solicitar ayuda a la UE, pero insistió en esperar a las medidas del BCE.

Alemania y Francia se resisten por ahora a la recesión que se va extendiendo por Europa y ambas economías mantienen el tono: la germana creció un 0,3% en el segundo trimestre -más de lo adelantado por los analistas- mientras que la gala, más débil, aguantó el tipo y se mantuvo estancada entre abril y junio. Así lo han adelantado los institutos de estadística de ambos países en sus primeras estimaciones publicadas este martes. Los expertos habían previsto que la actividad económica germana se ralentizase en el segundo trimestre y registrara un crecimiento de solo dos décimas en su Producto Interior Bruto (PIB), pero la subida de las exportaciones y del consumo ha mejorado esos cálculos y ha permitido compensar la bajada en las inversiones registrada entre abril y junio.

El Banco Central Europeo (BCE) ha subrayado en el Boletín Mensual de agosto que las primas de riesgo "excepcionalmente altas" de algunos estados miembros del euro que están relacionadas con la reversibilidad del euro "son inaceptables y han de afrontarse de manera contundente". "El euro es irreversible", insiste el BCE en el documento que, al igual que hiciera su presidente Mario Draghi hace unos días, anima a los Gobiernos de la zona euro a seguir con la consolidación fiscal y a solicitar, si fuera necesario, la ayuda necesaria procedente de los fondos de rescate europeos. Además, el Banco Central Europeo ha revisado a la baja las expectativas de crecimiento del PIB tanto en 2012, año en el que profundizará en la recesión, como en 2013.