Seguidores del líder chií iraquí, Muqtada al Sadr, han asaltado este lunes el Palacio Presidencial en Bagdad después de que el influyente líder religioso anunciara su retirada definitiva de la política de Irak, mientras las autoridades intentan contener la situación decretando un toque de queda en todo el país.
Al menos una treintena de personas han muerto y más de 250 heridos por "disparos y actos violentos" en Bagdad, según han detallado las agencias de noticias.
Centenares de seguidores de Al Sadr, acampados desde hace cuatro semanas frente al Parlamento, han entrado en la fortificada "Zona Verde" y han irrumpido en el Palacio Presidencial y en la sede del Gobierno.
El ingreso de centenares de seguidores de Al Sadr en la Zona Verde tras romper las barreras de hormigón instaladas en sus accesos ha tenido lugar después de que el influyente clérigo anunciara en un comunicado que "se retira definitivamente" de la política. Ante la creciente tensión, el líder ha anunciado una huelga de hambre hasta que termine el uso de la violencia y armas.