En Kiev aumenta el temor a un ataque inminente de las tropas de Vladímir Putin en la guerra de Ucrania. A la capital ha regresado un equipo de TVE que lleva más de un mes informando desde Ucrania, formado por Miguel de la Fuente, Hugo Úbeda y Oscar Mijallo. La enorme columna de tanques que lleva varios días a las afueras de la capital parece que se ha reagrupado y el Reino Unido cree que la ofensiva podría ser inminente.
La ofensiva se está extendiendohacia el oeste en la guerra en Ucrania, donde Rusia ha bombardeado las bases de Ivano-Frankivsk y Lutsk. En Zithomir, la enviada especial de TVE, Almudena Ariza, y su equipo se han tenido que refugiar en los sótanos del ayuntamiento de la ciudad. Mientras tanto, en el este del país, un bombardeo ruso ha caído por primera vez sobre Dnipro.
Rusia ha extendido los bombardeos en el decimosexto día de la guerra en Ucrania, y este viernes ha alcanzado las ciudades de Dnipro, en el sur, y Lutsk e Ivano-Frankvisk, ambas en el oeste. Dnipro no había sido bombardeada hasta ahora, mientras en las otras dos ciudades el objetivo han sido los aeródromos militares, que ya fueron alcanzados al comienzo de la invasión. Rusia ha confirmado los ataques contra los aeródromos.
Las autoridades locales de Dnipro aseguran que han sido alcanzadas zonas civiles, entre ellas las cercanías de una guardería y una fábrica de zapatos, matando a una persona. En Lutsk, cerca de Polonia, ha habido dos muertos, según fuentes locales, y seis heridos.
En Járkov, el gobernador regional ha informado de que un hospital psiquiátrico con más de 300 pacientes ha sido alcanzado, aunque no ha habido víctimas porque se encontraban refugiados en los sótanos.
Las informaciones facilitadas por las fuentes locales ucranianas no han podido ser verificadas por fuentes independientes.
En la capital, buena parte de la población ya ha huido. Imágenes de satélite tomadas por la empresa privada estadounidense Maxar muestran que el gran convoy militar ruso, visto por última vez al noroeste de Kiev, cerca del aeropuerto de Antonov, se ha dispersado y redistribuido a las puertas de Lubyanka.
Foto: Efectos de los bombardeos en Dnipro. Emre Caylak / AFP
El ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, José Manuel Albares, ha afirmado que todavía hay más margen para ahogar la economía rusa, que, a su juicio, ya "empieza a dar signos de colapso".
En una entrevista en La Hora de la 1, el ministro ha asegurado que "la UE tomará todas las medidas necesarias para conseguir el colapso económico de Rusia e impedir que financie la guerra". No obstante, ha abogado por ser "cuidadosos" para que no sean los ciudadanos europeos los que sufran las "consecuencias de la guerra".
Por otra parte, ha confirmado que España enviará más armas a Ucrania para su defensa, al tiempo que ha vuelto a descartar que la OTAN vaya a establecer el espacio de exclusión aérea, como reclama el presidente ucraniano, Volodomir Zelenski, pues, ha asegurado, no quieren que "dar excusas para que escale más Putin".
FOTO: José Manuel Albares, en una rueda de prensa este miércoles en la Residencia de España en la Ciudad de México. EFE/ Mario Guzmán
Este viernes, decimosexto día de la invasión rusa en Ucrania, nuevos ataques aéreos han alcanzado áreas civiles en Dnipro. Varias explosiones también se escucharon esta madrugada en la ciudad de Lutsk, a unos 100 km de la frontera con Polonia, según informa su alcalde, Igor Polischuk.
El Ejército ruso mantiene su ofensiva en el sur y continúa su avance hacia Kiev después de que haya fracasado el primer intento de negociación de alto nivel con Rusia.
Mientras, más de 80.000 personas han sido evacuadas de varias localidades del país en dos días, aunque la negativa de Rusia a abrir corredores humanitarios está afectando especialmente a Mariúpol, que continúa asediada sin agua ni electricidad.
Foto: Civiles huyen a través de Irpin, cerca de Kiev. EFE/EPA/ROMAN PILIPEY
Mariupol es ahora una de las ciudades más castigadas de Ucrania, y una de las más codiciadas por el Ejército ruso. Ya son más de mil muertos en el asedio, según las autoridades locales, por lo que algunos han tenido que ser enterrados en fosas comunes. Situada al sur del país, tomarla supondría para Moscú controlar un importante puerto del mar de Azov. Mientras, sigue la polémica en torno al ataque a un hospital materno-infantil.
Son las imágenes de la destrucción de varios tanques rusos en las afueras de Brovary, Ucrania. Según Kiev, el ataque ha sido exitoso. Es la brutalidad de una guerra que, este jueves, entra en la tercera semana sin que se haya alcanzado ninguno de sus objetivos declarados, a pesar de los miles de muertos, los más de dos millones de desplazados y los miles de personas que se encogen en las ciudades asediadas bajo un bombardeo incesante.
"Extranjeros que queréis defender a Ucrania os invito a que contactéis con nuestras misiones diplomáticas en vuestros países. Juntos derrotamos a Hitler y juntos derrotaremos a Putin". Así invitó hace unos días el ministro de exteriores de Ucrania, a voluntarios de todo el mundo a combatir a las tropas rusas.
Este veterano canadiense ha llegado a Leópolis y es uno de los 20.000 extranjeros que quieren unirse al frente ucraniano. "He venido por lo que Putin está haciendo al pueblo de Ucrania es horrible, es un matón, y no me gustan los matones", dice a TVE.
La esperada reunión entre los ministros de Exteriores deRusia y Ucrania ha acabado sin acuerdo. Moscú rechaza el alto el fuego que reclaman los ucranianos tras los ataques sobre la ciudad asediada de Mariúpol, en el sur del país.
La ofensiva rusa en la ciudad de Mariúpol, en el sur de Ucrania, ha dejado unas imágenes terribles, como las de las fosas comunes para enterrar a los fallecidos. Tras el ataque este miércoles a un hospital materno infantil que dejó tres muertos, han seguido los bombardeos sobre la ciudad.
Foto: Imágenes del efecto del bombardeo del hospital material de Mariúpol, el 9 de marzo. EJÉRCITO DE UCRANIA, VÍA REUTERS.
Los ministros de Exteriores de Rusia y Ucrania se han reunido este jueves en la primera reunión de alto nivel desde que empezó la invasión rusa. Serguéi Lavrov y Dmytro Kuleba se han visto en Antalya (Turquía), con mediación turca. El encuentro ha durado apenas hora y media y ha concluido sin ningún compromiso concreto, y con diferentes interpretaciones sobre si es el formato adecuado.
Kuleba ha asegurado que había acudido al encuentro con la intención de alcanzar un alto el fuego de 24 horas para aliviar la situación humanitaria, especialmente en Mariúpol, donde este miércoles fue bombardeado un hospital. "No hemos hecho progreso en esto", se ha lamentado en la rueda de prensa posterior.
Según Kuleba, su homólogo ruso tiene una "impresión distinta" sobre lo que ambos ministros pueden negociar. No obstante, Kuleba se ha mostrado dispuesto a "proseguir nuestros esfuerzos para buscar una solución a la tragedia humanitaria sobre el terreno".
El ministro ruso ha acusado a los ucranianos de utilizar a la población civil "como rehenes". "Nosotros intentamos abrir los corredores humanitarios todos los días", ha afirmado.
Foto: EFE/EPA/CEM OZDEL / Ministerio de Exteriores de Turquía