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Mujer decidida, apasionadamente melancólica, pero siempre libre e independiente. La breve vida de la chilena Teresa Wilms Montt (1893-1921) transcurrió entre excesos sentimentales y falta de comprensión, desengaños, escasas y fugaces alegrías y  profundos sinsabores. Por una decisión amorosa, Teresa fue repudiada por sus padres. Su marido, Gustavo –que con el tiempo resultaría ser un marido celoso, bebedor y restrictivo– y Teresa –que hablaba varios idiomas, era culta y deslumbraba con su fino porte y su decidida actitud– se trasladaron desde Viña del Mar a Santiago, donde ella quedó cautivada por los encantos de la gran ciudad y por los atractivos de una vida cultural que hasta entonces no había paladeado. Comenzaba así una historia de viajes y fugas por Europa y América, decepciones, traiciones, fulgurantes ascensos y escalofriantes descensos, un vertiginoso contraste del que finalmente no pudo salir indemne... Carlos Javier González Serrano charla con Mayte Martín Ramiro, especialista y editora de la obra de Teresa Wilms Montt y profesora de Literatura, sobre la vida y la literatura de esta genial y aún no muy conocida autora que escribió: “Amo la Nada, porque la Nada es Todo, y el Todo soy yo cuando pienso y amo”.

Arthur Schopenhauer escribió que la música narra la historia más secreta de la esencia del mundo. Beethoven sostuvo una postura similar, y llegó a afirmar que ninguna filosofía sería jamás capaz de expresar con palabras lo que una pieza musical puede transmitir a través de sus ritmos y melodías. Tanto para Schopenhauer como para Beethoven, hijos de una misma época, la música desprende un sentido y esconde una significación y, por tanto, su naturaleza es simbólica. La música expresa la esencia del mundo. Música y filosofía han estado estrechamente unidas desde el comienzo de los tiempos. Así lo creyó también Gustav Mahler y, años antes, Richard Wagner, compositores ambos hondamente emparentados con el pensamiento de Arthur Schopenhauer. Carlos Javier González Serrano se pregunta, con Alessandro Pierozzi -bibliotecario, músico y melómano-, qué tipo de conocimiento encierra la música y por qué y cómo nos ofrece tanto consuelo y acompañamiento en un escenario, el de la vida humana, tan plagado de dificultades. La música, acaso, sea la auténtica salvación. 


Explicó la filósofa Simone Weil que si el pensamiento no se traduce en actos no tiene “dónde agarrarse”. En sus años de docencia, Weil siempre invitó a sus alumnas a que pensaran por sí mismas; con ese objetivo les recomendaba escribir sobre asuntos de diversa índole. Su filosofía estuvo ligada desde el primer momento a la realidad que le tocó en suerte vivir. A juicio de Weil, una filosofía que no lucha por llevar a la realidad sus convicciones está herida de muerte. Y la filosofía, en particular, como adalid de la responsabilidad, la libertad y del cuidado, ha de velar por la justicia social y la lucha contra la desigualdad. Carlos Javier González Serrano conversa con Mercedes López Mateo, escritora, investigadora y especialista en la figura de Simone Weil, pensadora que cobra una relevancia central en nuestra actualidad por sus atinadas reflexiones sobre el poder, la opresión, el pacifismo, la coacción y las razones de la lucha social. ¿Qué podemos aprender hoy de Simone Weil? 


Escribió María Zambrano que los libros no son sólo un objeto, sino que también tienen vida propia: tienen un peso, un contenido, un lugar, un tiempo, y un espíritu. A través del contacto con ellos, los libros configuran y reconfiguran nuestras vidas. Parafraseando a Hermann Hesse, los libros no nos enseñan a vivir, pero sí nos hacen vivir más y mejor, más intensamente. Y es que, quizá, los libros no nos muestren cómo vivir, pero sí nos abren caminos nuevos para sentir, interpretar o reflexionar. Además, el libro es un instrumento privilegiado contra el totalitarismo, al introducir nuevas propuestas de diálogo entre los lectores. Carlos Javier González Serrano charla con Javier Jiménez, director de la editorial Fórcola y escritor, sobre este plural y casi mágico estatuto de los libros: esos objetos que, como sugirió Stefan Zweig, han permitido que nunca podamos sentirnos solos. O dicho a la inversa: el libro como fiel compañero que siempre nos acompaña.


En las últimas décadas, los preceptos pseudoestoicos, barnizados de autoayuda y estéril pensamiento positivo, nos invitan a vivir la vida con plenitud y alegría al margen de las circunstancias externas, es decir, nos narcotizan e incapacitan para pensar la realidad con compromiso cívico y ciudadano. Desde sus comienzos, el ámbito práctico de la filosofía siempre estuvo unido a un ahínco por transformar la realidad. Sugirió Ortega y Gasset que la filosofía es el arte de mantener los ojos en pasmo, en constante asombro. Ahora bien, si ese nuevo ver o esa nueva forma de pensar la realidad no se traducen en un actuar, la filosofía queda convertida en un vacío y petulante ejercicio racional. Carlos Javier González Serrano conversa con Sara Caballero, periodista, comunicadora y amante de las humanidades, sobre la vertiente práctica de la filosofía y de cómo la actitud filosófica nos ayuda a no dejarnos arrastrar. A pensar cómo estamos viviendo. A pensar para, al fin y al cabo, aprender a actuar mejor.  


El crítico literario, ensayista, poeta y narrador Toni Montesinos presenta en el informativo 24 horas de RNE su nuevo libro Ojos llenos de alegría. Estar vivo con R.W. Emerson. Con él, termina su trilogía sobre los trascendentalistas, después de haber repasado en profundidad la literatura de H. D. Thoreau y Walt Whitman. "Estos autores nos dicen verdades a la cara de manera contundente, especialmente Emerson", asegura. Sobre su propia escritura, afirma que pretende enganchar al lector, "hacerle sentir cómodo tanto si es un experto en literatura como si es un neófito".

La inquietud por la salud mental de la población se ha convertido en un recurrente tema de conversación en nuestro día a día. Hablamos con frecuencia y naturalidad del creciente número de trastornos emocionales y de la conducta que la ciudadanía padece en su vida cotidiana, de malestares que se han transformado en un efecto usual y colateral del hecho de participar de la cultura contemporánea. Estos malestares han colonizado nuestro modo de vida y nuestro lenguaje. Carlos Javier González Serrano se plantea, con Marino Pérez Álvarez, psicólogo y catedrático de la Universidad de Oviedo, una urgente pregunta: qué está ocurriendo para que nos hayamos habituado peligrosamente a considerar como algo usual el hecho de que, en general, sentimos que algo anómalo está ocurriendo con nuestra salud mental y que, además, debemos vivir con ello, como si se tratara de una suerte de acatamiento e incluso esclavitud emocional. 


“Yo pensé que las preguntas que me hacían mis hijas eran una buena puerta a la filosofía”, ha explicado en Las Mañanas de RNE el escritor y filósofo Wolfran Eilenberger, sobre cómo empezó a escribir su libro ‘¿Sufren las piedras?’. Cree que la gente tiene “una forma curiosa de comprender lo que es un filósofo”, e indica que, en su caso, lo que quiere es comprender cómo la filosofía enriquece su vida: “Creo que la filosofía tiene una capacidad transformadora y que transforma nuestras propias experiencias”, ha señalado el autor alemán. Algo que, dice, trata de mostrar a través de sus libros.

Últimamente se intenta difundir una relación culpabilizadora y paternalista con los adolescentes que no hace más que condenarlos a un incómodo estado de minoría de edad intelectual y emocional. Culpar –bajo la capa de intentar proteger– a las nuevas generaciones de los males epocales que padecen (influencia de las redes sociales, crecientes déficits de atención, trastornos psicológicos, creciente precarización laboral, etc.), señalándolos como víctimas inactivas o inoperantes, no ayuda a que adopten una perspectiva crítica y consciente sobre su realidad. En este episodio, Carlos Javier González Serrano charla con Miriam Al Adib Mendiri, ginecóloga, obstetra y profesora en la Universidad de Extremadura, sobre la relación de la adolescencia con la sexualidad, sobre sus cambios corporales y existenciales. En lugar de juzgar, quizá deberíamos esforzarnos por acercarnos y entender la perspectiva y las problemáticas de un momento vital, como es la adolescencia, plagado de conflictos y dudas en un entorno muchas veces hostil y en exceso competitivo.


Hanno Sauer es profesor de Ética en la Universidad de Utrecht y se ha acercado hasta los micrófonos del informativo 24 horas de RNE para presentar su libro La invención del bien y del mal. Sauer explica que lo que intenta es "ver y analizar el discurso moral que tenemos en la sociedad actual". "Lo que yo he escrito en mi libro es una historia de la moral. Es una mas de las infinitas posibilidades que existen", añade. El profesor de ética cuenta que existe una tendencia "de establecer una diferencia entre nosotros y ellos" y que "hoy la diferencia más visible que existe es la de ser progresista o conservador"

Nos hemos acostumbrado peligrosamente a adoptar e imponer a nuestra vida ritmos rápidos, vertiginosos y poco conscientes. Somos hipnotizados y narcotizados, en los escasos entreactos de los que disponemos, con un sinfín de aplicaciones y aparatos tecnológicos que mantienen nuestra capacidad de desear siempre espoleada. En clave social y política, la rapidez con la que corre nuestro mundo beneficia a los dogmatismos de todo tipo. Cuando parece no haber tiempo para pensar, se nos empuja a elegir entre recetas y fórmulas que no necesitan elaboración propia. Carlos Javier Gonzalez Serrano se preguntara con Amador Fernández Savater, activista, profesor y autor de numerosos libros, si necesitamos recuperar esa atención perdida, o quizá extraviada, y con ello reconquistar también la lentitud del pensar para situarnos con plena conciencia y libremente en nuestro presente.



Desde antiguo, uno de los gestos más plenamente humanos es el de mirar hacia arriba. No sólo para buscar vida fuera de nuestro planeta, para investigar o estudiar la naturaleza, sino también para buscar consuelo, amparo o respuestas a una existencia que, en ocasiones, nos entrega a interrogantes muy difíciles de contestar. Las preguntas científicas remiten a cuestiones humanísticas, y, por su parte, las humanidades necesitan de los datos y evidencias que proporciona la ciencia. Más que nunca, en una cultura dominada por la tecnología digital y por las inteligencias artificiales, necesitamos aunar ciencias y humanidades para poder hacer frente a los plurales retos que se nos abren en un complejo horizonte. En este episodio, Carlos Javier Gonzalez Serrano mira al cielo con Montserrat Villar, astrofísica del Centro de Astrobiología, para  interrogarse sobre algunas cuestiones astrofísicas y para ahondar en el continuo impulso del ser humano por querer saber siempre más sobre la inmensidad de la esfera celeste.  

Escribió Lucrecio que entre los amantes existe una herida oculta que nunca puede llegar a curarse: el deseo es una fuente inagotable de aspiraciones y frustraciones cuya dinámica nos envuelve en el siempre incapaz intento de llegar a satisfacer nuestro ánimo. En el amor hay sin duda un importante componente biológico que queda reflejado en la liberación de ciertas sustancias químicas en el cerebro. Pero el amor nunca se queda ahí. El amor, sostuvo María Zambrano, es aquello que nos trasciende y nos hace trascender el mundo fenoménico. En esta entrega, Carlos Javier Gonzalez Serrano charla con Lorenzo Rodríguez Garrido, poeta y periodista cultural, en una exploración de las diversas caras del amor, transitando todas sus figuras: la ausencia, el olvido, la pasión, el recuerdo o el sentimiento. ¿Por qué, a pesar de los sinsabores y las penas, de las dificultades y los sufrimientos, seguimos siempre, incansables, aspirando al amor? 

Nuestra vida transcurre en el tiempo. Somos seres esencialmente temporales que han de contar con la finitud y, por tanto, con la memoria y el recuerdo, con el pasado, que a la vez nos proyecta al futuro. Pero no sólo somos lo que nos pasa, sino también lo que nos contamos sobre aquello que nos pasa. A la vez, es esa misma conciencia temporal la que nos circunscribe al terreno de la libertad y de la responsabilidad. Todo está siempre por hacer, al decir de Hannah Arendt, y son nuestros actos los que pueden llegar a cambiar el transcurso de lo porvenir. En este episodio, Carlos Javier Gonzalez Serrano dialoga con Mayka Lahoz, escritora y doctora en Filosofía y Letras, sobre la relación entre tiempo y memoria e identidad y recuerdos para hacernos conscientes de que, como apuntó Albert Camus, sólo podemos llegar a ser rebeldes si aceptamos nuestro ser temporal.