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Los ataques en Gaza continúan. En las últimas horas, en Al Mawasi, en el centro de la Franja, han muerto más de una decena de miembros de una misma familia. En el norte, en Yabalia, hay más de una treintena de muertos. Es donde el Ejército israelí está centrando su ofensiva, que deja 500 fallecidos en algo más de dos semanas. En la ONU, el embajador palestino, arropado por países árabes, ha denunciando la crítica situación en el norte de Gaza. Por otra parte, Israel ha denunciado que la residencia privada del primer ministro, Benjamín Netanyahu, ha sido atacada por un dron procedente del Líbano. Tras la muerte del líder de Hamás, Yahya Sinwar, la tensión sigue en máximos. El líder supremo de Irán, el mayor patrocinador de Hamás y Hizbulá, ha asegurado que su muerte no les va a detener.

Foto: Edificio atacado por Israel en Al Mawasi, en el centro de la Franja de Gaza (REUTERS/Ramadan Abed)

Tras celebrar la muerte de Sinwar, la sociedad israelí se pregunta si esta es la ocasión de lograr un alto el fuego en Gaza. El presidente estadounidense Biden cree que este momento es "una oportunidad para buscar el camino de la paz". Igual que la Unión Europea o el Reino Unido. El primer ministro Starmer dice que es hora de volver la senda hacia la "solución de dos estados".

Pero Netanyahu dice que la guerra solo acabará con la rendición de Hamás. "Esto no es el fin de la guerra en Gaza, es solo el principio del fin", advierte.

Mientras, los tanques israelíes continúan en Líbano y Tel Aviv promete represalias contra Irán, que llama a la resistencia a sus aliados en Yemen o Siria.

"Los rehenes no volverán hasta que las tropas israelíes se retiren de la Franja y liberen a los palestinos encarcelados", asegura el número dos de Hamás en Gaza, Jalil al Jaya. Mientras, en los campamentos de refugiados palestinos, unos creen que Sinwar será reemplazado rápidamente. Otros, dicen que con su final "Israel ya no tiene razones para continuar este genocidio".

FOTO: REUTERS/Ronen Zvulun

Israel ha matado al hombre más buscado de Hamás, a Yahya Sinwar, considerado el ideólogo de los ataques del 7 de octubre del año pasado. Analizamos su futuro y lo que implica para la política israelí su asesinato con Carmen López Alonso, profesora emérita de Historia del Pensamiento Político en la Universidad Complutense de Madrid y autora de Hamas: de la marcha hacia el poder al vuelo de Ícaro.

José Vericat, investigador principal del Real Instituto Elcano (RIE), ha asegurado sobre la muerte del líder de Hamás, Yahya Sinwar, que es "un momento de oportunidad que permite a las partes mostrar mayor flexibilidad".

"Sinwar ha sido presentado como el principal obstáculo por estadounidenses, por Israel. Eso es subjetivo. Quién era el obstáculo depende de cómo se mire. Si se considera que el objetivo de las negociaciones del alto el fuego son únicamente la liberación de los rehenes israelíes y la permanencia del Ejército israelí en Gaza, entonces sí era el obstáculo", ha afirmado en una entrevista en el Canal 24h.

"Pero creo que la posición de Sinwar era simplemente la de Hamás y no era tan distante de la que han propuesto otras fuerzas: algún tipo de intercambio de prisioneros, la retirada israelí de la totalidad de la Franja de Gaza, al menos gradualmente, y luego algún tipo de acuerdo sobre una nueva administración palestina en Gaza", ha añadido.

FOTO: Foto AP/Osamah Abdulrahman

Eliminado el líder de Hamás, la pregunta es si se abre una ventana para un posible alto el fuego en Gaza. Es lo que desean muchos en Israel, principalmente los familiares de los rehenes.

Biden cree que hay una oportunidad para allanar el camino a la paz. En la misma linea la Unión Europea. El primer ministro israelí, sin embargo, no menciona por ahora esa posibilidad.

Para Netanyahu, el final de la guerra no está a la vuelta de la esquina sino que entiende que sigue teniendo una ventana de oportunidad para seguir adelante y para seguir atacando. Es decir, mantener los frentes actuales más allá de la Franja, en Líbano, Irak, Siria, Yemen e Irán, al que ha prometido atacar tras la última andanada de misiles lanzada por el régimen de los Ayatalotás. Por eso, desde Teherán hablan de fortalecer el llamado eje de la resistencia. Hizbulá anuncia una nueva fase de la escalada.

FOTO: REUTERS/Khaled Abdullah

Mientras el Ejército de Israel centraba su ofensiva en el norte de Gaza, en la punta sur de la Franja soldados de Infantería hallaron en una operación rutinaria de rastreo el botín militar más codiciado de esta guerra.

En un edificio bombardeado, encontraron a un miliciano herido, con el rostro tapado y tomando aliento en un sillón. Apenas se le ve entre el polvo. Por eso, la imagen se distribuye postproducida. El hombre lanza un palo para tratar de derribar el aparato. Son, siempre según el relato israelí, los últimos segundos de vida de Yahya Sinwar.

"Murió mientras escapaba. No como un jefe militar", sentencia el ministro de Defensa.

La policía científica ha confirmado su identidad. "Se nos solicitó ayuda desde el Ejército. Nos enviaron fotos de la dentadura del cadáver y la comparamos con los datos dentales que teníamos de Sinwar. Coincidían. Al mismo tiempo, llegaron muestras del cuerpo para cotejar el ADN y cuando trajeron el cuerpo al Instituto Fornese, comparamos las huellas dactilares".

Todo confirmaba que el miliciano era el mismo hombre que pasó 20 años en cárceles israelíes y que hace 12 meses ideó y organizó la masacre del 7 de octubre.

El portavoz del Ejército israelí asegura que Sinwar estaba solo. Ni rastro de los rehenes: quedan 97 en la Franja. Durante todo este año se ha especulado con la posibilidad de que Sinwar los utilizara como escudos humanos en los túneles donde se ocultaba.

FOTO: Israel Defense Forces

El asesinato del máximo líder de Hamás, Yahya Sinwar, al que se considera el cerebro de los atentados del 7 de octubre, dibuja un nuevo escenario en Gaza. Era el hombre más buscado por Israel y, aunque Netanyahu dejó claro ayer que la cabeza del dirigente de Hamás no supone el fin inmediato de la guerra, podría implicar la apertura de una vía hacia el alto el fuego y la liberación de los rehenes.

Netanyahu tiene previsto celebrar este viernes una reunión de seguridad restringida que, aunque iba a estar focalizada en Irán, parece que va acabar derivando hacia un acuerdo con Hamás. Tras el asesinato de Hasán Nasralá, líder de la milicia libanesa Hizbolá, la inteligencia israelí defendió que era el momento adecuado para alcanzar el acuerdo, que no llegó. Según se ha filtrado desde el entorno de las negociaciones, estarían tratando de buscar alternativas.

La muerte del líder de Hamás, Yahya Sinwar, en Gaza, ha descabezado a la organización palestina y ha elevado la presión sobre Israel para que ponga fin a la guerra en la Franja, que dura ya más de un año y ha dejado más de 42.000 víctimas, la mayoría civiles.

Sin embargo, el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, ha asegurado que la guerra seguirá hasta que Hamás entregue a todos los rehenes y se rinda.

Yahya Sinwar, el representante de la línea más dura y combativa de Hamás y hombre más buscado por Israel, ha muerto este jueves en Gaza en un ataque perpetrado por soldados israelíes. Poco más de dos meses ha estado al frente de la organización, un liderazgo que asumió contra todo pronóstico el pasado 6 de agosto tras el asesinato en Teherán de su predecesor, Ismail Haniye.

De él se decía que era inteligente, carismático, autoritario y hasta un sádico. Algunos creen que era el cerebro de los atentados del 7 de octubre de 2023 o al menos, uno de ellos.

Yahya Sinwar era, sin duda, una de las figuras más decisivas del liderazgo de Hamás y desde los atentados el más buscado por Israel. Sucedió a Ismail Haniya tras su muerte como máximo líder de Hamás.