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Nicolas Sarkozy tiene ya puesta la mirada en el domingo 6 de mayo, fecha de la segunda vuelta de las elecciones presidenciales. Y lo hace con nuevos guiños a la extrema derecha. Este martes, en declaraciones a la televisión pública, ha dicho que Francia no puede seguir recibiendo tantos extranjeros y se ha mostrado partidario de reducir a la mitad la entrada de inmigrantes.

El socialista François Holland parte como favorito, pero sólo a punto y medio de Sarkozy. Si quiere ganar el líder conservador debe ahora atraerse dos votos contradictorios, el de centro y el de la extrema derecha y es que la sorpresa estuvo en los resultados históricos de Le Pen. El crecimiento de la extrema derecha ha relanzado el interés de la segunda vuelta de estas presidenciales. Por un lado, el voto de la izquierda ha sido menor de lo pronosticado por los sondeos, y eso le complica las cosas a Hollande. Y por otro, Sarkozy debe escorarse más a la derecha si quiere garantizarse la reelección.

¿Por qué Nicolas Sarkozy es el primer presidente que se presenta a la reelección, y no acaba en cabeza tras la primera vuelta? Eric Bonnet, director de un instituto de sondeos, recuerda la impopularidad de Sarkozy, y que en el 2007 prometió solucionar problemas como el paro o el poder adquisitivo: sin embargo, la situación actual sería cada vez peor. De ahí que muchos de sus entonces votantes, obreros y jóvenes, de clases populares, le den ahora la espalda. Y castigan al mismo tiempo el tradicional bipartidismo, al irse con la candidata que se sitúa fuera del sistema. Una Marine Le Pen, que supera el respaldo que consiguió su padre cuando en 2002 se coló en la segunda vuelta, y que en campaña ya amagaba con dar la sorpresa. Sus electores provienen sobre todo del norte y el sureste de Francia, y gana terreno en el mundo rural. En la segunda vuelta, Nicolas Sarkozy ha de resolver una difícil ecuación: necesita el apoyo tanto de centristas, como de ultraderechistas

En apenas unos meses, François Hollande, ha pasado de ser el candidato de compromiso del Partido Socialista, a convertirse en la esperanza de la izquierda francesa para arrebatarle a Nicolás Sarkozy las llaves del Elíseo. Por eso, nada más conocerse los resultados, el presidente le reclamaba tres debates televisados. Y por eso, Hollande sólo le condedía uno.

Además, si Sarkozy no quiere convertirse en el primer presidente francés que no consigue la reelección en 30 años, tendrá que agarrarse (y procurar no quemarse) al clavo de Marine Le Pen

Elecciones en Francia. Elecciones en Francia. Tras la primera vuelta, el próximo 6 de mayo se jugarán la Presidencia el candidato socialista Francois Hollande y el actual presidente, Nicolás Sarkozy. Son los dos nombres que se han impuesto en la primera ronda de unas elecciones que pueden ser decisivas tanto para Francia como para la Unión Europea pues Hollande se ha mostrado contrario al rumbo de austeridad marcado hasta ahora por Ángela Merkel y Nicolás Sarkozy.

Hablamos de este asunto con José Ignacio Torreblanca, profesor titular en el Departamento de Ciencia Política y de la Administración de la UNED e investigador principal y director de la oficina en Madrid del Consejo Europeo de Relaciones Exteriores. José Ignacio Torreblanca, profesor titular en el Departamento de Ciencia Política y de la Administración de la UNED e investigador principal y director de la oficina en Madrid del Consejo Europeo de Relaciones Exteriores.

La reacción negativa de las bolsas tras las elecciones francesas está en su opinión provada por la incertidumbre de lo que pueda pasar. "Si gana Hollande va a intentar cambiar el modelo pero no creo que empiece con un giro que tenga que rectificar después".

No se trata de romper la baraja con Alemania sino de encontrar un contrapeso y equilibrar la política económica europea. El candidato socialista no lo va a tener fácil, según piensa, porque tendrá que sentarse a negociar de manera inmediata con Alemania y estará en una situación muy complicada. En este momento si uno toma el programa de los socialdemócratas alemanes y los socialistas franceses estos son más favorables para España.

"Hay una cierta decepción con líderes como Merkel o Sarkozy que no han entendido los condicionamientos de los países del sur de Europa". No han sido los aliados que España esperaba. Es bueno que empiece a haber equilibrios de fuerza en la Comisión y el Parlamento europeos. Es bueno que empiece a haber equilibrios de fuerza en la Comisión y el Parlamento europeos.

El socialista François Hollande sería según los primeros resultados el ganador de la primera vuelta de las elecciones presidenciales francesas pero con mínima ventaja respecto al conservador Sarkozy. Hollande y Sarkozy se disputarían la presidencia en la segunda vuelta.

El socialista François Hollande ganó hoy la primera ronda de las elecciones presidenciales francesas y disputará la jefatura del Estado al presidente saliente, Nicolas Sarkozy, el 6 de mayo, según sondeos difundidos al cierre de los centros de votación.

El socialista François Hollande ganó hoy la primera ronda de las elecciones presidenciales francesas y disputará la jefatura del Estado al presidente saliente, Nicolas Sarkozy, el 6 de mayo, según sondeos difundidos hoy al cierre de los centros de votación. Las encuestas indican que Hollande alcanzó entre un 28,4 y un 29,3 % de los votos y Sarkozy una horquilla de sufragios de entre el 25,5 y el 27 %. En tercera posición se sitúa, según esos sondeos, la candidata del ultraderechista Frente Nacional (FN), Marine Le Pen, con entre un 19 y un 20 % de los votos, por delante del izquierdista Jean-Luc Mélenchon (8-11,7 %).

En Francia están votando desde las ocho de la mañana en la primera vuelta de las elecciones presidenciales. La participación está siendo algo más baja que en las anteriores, las de 2007. Las encuestas muestran una ventaja considerable de Hollande y Sarkozy sobre los otros ocho candidatos.