May se enfrenta a una moción de censura de los laboristas tras el rechazo al acuerdo del 'Brexit'
- El laborista Jeremy Corbyn intentará forzar una convocatoria de elecciones
Los unionistas norirlandeses y los tories apoyarán a May
Los unionistas norirlandeses y los tories apoyarán a May
El sonoro portazo del Parlamento británico al pacto suscrito por Theresa May y la Unión Europea para implementar un brexit amistoso plantea ahora un escenario incierto y, sobre todo, abierto, tanto en Bruselas como en Londres, donde la primera ministra se enfrenta a la primera consecuencia de la votación negativa de este martes: una moción de censura.
Tras el contundente rechazo expresado este martes por el Parlamento británico al acuerdo de Brexit negociado por Theresa May, el presidente de la Comisión Europea (CE), Jean-Claude Juncker, no da por perdida esta batalla: "Por parte de la Unión Europea, el proceso de ratificación del acuerdo de retirada continúa".
El Parlamento británico ha rechazado el Acuerdo de Retirada del Reino Unido de la Unión Europea (UE) negociado por la primera ministra, Theresa May, con Bruselas por 432 votos en contra y 202 votos a favor, por lo que el proceso del Brexit queda ahora sumido en la incertidumbre con un Gobierno muy tocado que se enfrenta este miércoles a una moción de censura.
Dos tercios de la Cámara de los Comunes han rechazado el acuerdo del Brexit de Theresa May este martes. 432 diputados han votado en contra del acuerdo y solo 202 lo han apoyado. May dispone ahora de un plazo de tres días hábiles para presentar un plan alternativo, pero lo más inmediato es hacer frente a la moción de censura presentada por la oposición laborista, que tiene pocas probabilidades de prosperar.
Partidarios y detractores del 'Brexit' se han movilizado este martes en Westminster
El Parlamento británico vota este martes el acuerdo del Brexit pactado por la primera ministra, Theresa May, con Bruselas. Después de dos años de negociaciones tras el referéndum de 2016, la mayoría de diputados británicos rechazarán previsiblemente el acuerdo, lo que abrirá un escenario incierto en Reino Unido. Ante una derrota, May deberá presentar un plan alternativo en un plazo de tres días, aunque la oposición podría movilizarse para forzar elecciones con una moción de censura.
15 de enero llegó la hora de la verdad en el Bréxit y todo es incertidumbre. Nuestros corresponsales en Londres y bruselas nos informan de la última hora.
El Parlamento británico decide este martes si acepta o rechaza el pacto suscrito entre Theresa May y la Unión Europea para implementar el brexit de forma amistosa. Con todas las hipótesis abiertas, las voces apuntan a que este acuerdo tiene más papeletas de encontrarse con la espalda de los parlamentarios que con sus manos abiertas.
Reino Unido afronta este martes una jornada decisiva e incierta para el futuro de la salida de la Unión Europea (UE), con la votación del Parlamento británico al Acuerdo de Retirada alcanzado entre la primera ministra, Theresa May, y los Veintisiete. El futuro del Brexit pende de los 635 diputados que decidirán este martes por la tarde si dan luz verde a las condiciones del divorcio o no.
La división de Reino Unido, que se refleja en los resultados del referéndum de 2016 -el 48% votó a favor de la permanencia y el 52% lo hizo a favor de la salida-, ha protagonizado la política británica en los dos últimos años, un periodo con numerosas dimisiones y un fracasado intento de derrocar a Theresa May por su gestión del Brexit.
La primera ministra británica, Theresa May, ha advertido este lunes de que el Parlamento británico quedará paralizado si la Cámara de los Comunes rechaza este martes su acuerdo para el Brexit. La líder conservadora ha aprovechado una de sus últimas ocasiones para convencer a la por ahora Cámara en contra de que si rechazan el texto negociado con Bruselas, se arriesgan a que se cancele el proceso de salida de la Unión Europea, previsto para el 29 de marzo de 2019.
Estamos en la víspera de la votación del acuerdo del Bréxit en el Parlamento de Westminster. Este lunes, los líderes del Consejo y la Comisión Europea han dado por carta a Theresa May garantías, que siguen quedándose cortas para los británicos.
Bruselas se compromete a evitar a toda costa que, si no hay acuerdo en 2021 sobre la futura relación, el Reino Unido quede atrapado en la unión aduanera para evitar una frontera física en Irlanda. Nos lo cuenta el corresponsal de RNE en Londres, Jordi Barcia.
El ministro de Exteriores cree que se podrian prorrogar los plazos del brexit si el Parlamento britanico no aprueba el acuerdo y pone como límite las elecciones europeas en las que por cierto no se descarta como cabeza de cartel.