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Los residentes de Marynka, un suburbio de la ciudad de Donetsk, en el este de Ucrania, han denunciado este sábado que el Ejército ucraniano ha bombardeado edificios civiles con artillería durante la madrugada.

Al menos 10 personas han muerto, según los vecinos, aunque los milicianos prorrusos elevan la cifra a 30. Ninguna fuente independiente ha confirmado estas cifras.

Donetsk se ha convertido, junto a Lugansk, en la frontera con Rusia, en la principal plaza que aún mantiene en su poder los milicianos prorrusos que luchan desde hace meses contra el Gobierno de Kiev. Hace una semana, los rebeldes se retiraron de Slaviansk, hasta entonces uno de sus bastiones, y este viernes abandonaron sus posiciones en la localidad de Siversk.

El Ejército ucraniano ha concentrado tropas y una columna de blindados frente a Donetsk, ciudad de casi un millón de habitantes, en espera del asalto final.

Un antiguo balneario de la época soviética convertido ahora en alojamiento improvisado de refugiados. Está tan solo a una hora de la frontera y es uno de los primeros lugares que encuentran los ucranianos que cruzan a Rusia por la región de Rostov del Don. Olga e Irina son vecinas de un pueblo cercano a Slaviansk, el fortín de los prorrusos, ya en manos de las tropas de Kiev. Yulia y Alexei salieron de Lugansk con sus hijos y dos bolsas de ropa. 

Los médicos cuentan que llegan con estrés postraumático y que hablan mucho con los pacientes. Moscú ha entregado a la región de Rostov del Don cinco millones de dólares para atender a los refugiados. En verano hay medios, pero aquí se teme la llegada del invierno. Según ACNUR, el número de refugiados en Rusia supera los 110.000 desde principios de año y en esta región son más de 20.000 ucranianos los que han salido huyendo del conflicto en el este de su país.

El Ejército ucraniano se encuentra ya a una veintena de kilómetros de Donetsk, la ciudad del este del país donde los milicianos prorrusos han concentrado sus fuerzas tras abandonar otras localidades en los últimos días.

El pasado fin de semana, los prorrusos se retiraron de uno de sus bastiones, Slaviansk, y se refugiaron en Donetsk, capital de la región del mismo nombre y con una población cercana al millón de habitantes. Los milicianos también se mantienen activos en Lugansk, en la frontera con Rusia. Los milicianos prorrusos hostigan al Ejército en su avance y han causado algunas bajas entre los militares. Según ha reconocido fuentes militares ucranianas, tres soldados han muerto y otros 27 han resultado heridos en las últimas 24 horas. Los prorrusos elevan esa cifra a 22 muertos.

Los separatistas prorrusos abandonan la ciudad ucraniana de Slaviansk. Lo ha confirmado el presidente del país, 

que ha ordenado al jefe del Estado Mayor izar la bandera estatal sobre el Ayuntamiento de la ciudad. Después de casi 3 meses atrincherados, los milicianos pro-rusos han huído hacia la  vecina Kramatorsk, después de que los tanques y la infantería del ejercito ucraniano entraran en Slaviansk esta madrugada.