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La prima de riesgo de España ha roto la barrera de los 500 puntos básicos y ha abierto en 504, ampliando su diferencial con el bono alemán. Los mercados siguen apretando después de que la prima española rozara ayer los 500 puntos pero luego desandara el camino volviendo a los niveles de apertura y cerrando en 460 puntos, gracias a la compra de bonos españoles por parte del Banco Central Europeo. Italia también sigue sufriendo la presión de los inversores que solo se fían de Alemania. Incluso países como Francia, Austria o Bélgica están viendo su riesgo país en zona de máximos. Desde París y Madrid, ya se ha pedido una intervención más activa del banco emisor que preside Mario Draghi con el fin de salvaguardar la maltrecha estabilidad del euro.

Hasta ahora, la crisis de deuda europea sacudió a pequeños países periféricos. Hoy el blanco es Italia, la tercera economía de la eurozona y séptima mundial, que quiere rescatarse a sí misma con un drástico cambio de gobierno en una semana, para frenar unas turbulencias que, de todos modos, sacudieron ya a otros once países. Nos responde el Profesor del español Centro de Estudios Monetarios y Financieros (CEMF), Claudio Michelacci.

La crisis se traduce en que a los países del Euro les sale más caro financiarse. Se frena el crecimiento y aumenta el déficit. Pero también hay quien sale ganando. Es lo que hemos preguntado hoy a los expertos, quién se beneficia con todo esto.

La prima de riesgo española, ha rozado los 500 puntos, antes de relajarse hasta los 460, después de la subasta del Tesoro español que ha colocado 3.562 millones de euros en obligaciones a diez años, y en la que el Tesoro se ha visto obligado a ofrecer un interés del 7,08%. El diferencial, que mide la rentabilidad extra que un país debe pagar por sus bonos a diez años, en relación a los alemanes del mismo plazo, ha tocado máximos, en 499 puntos. Los grandes valores han terminado la sesión en pérdidas, lideradas por el Banco Popular, que ha bajado un 1,86%, seguido por el Santander, que ha bajado un 1,43%. El mejor valor, la aseguradora mapfre, que ha subido más de un 3%.

Mientras, las bolsas europeas han registrado descensos moderados. El Ibex-35 ha cerrado con una bajada del 0,4%. Peor ha ido la sesión en otras grandes plazas: Fráncfort ha retrocedido un 1,07%; París, un 1,78%; Londres, un 1,56%; Milán, un 1,43%.

La Policía de Nueva York ha detenido al menos a 50 personas que formaban parte de una marcha de cientos de "indignados" que intentaba llegar hasta la sede de la bolsa en Wall Street. La manifestación se ha convocado para celebrar el día en el que se cumplen dos meses desde que comenzó el movimiento en Manhattan.

"No hemos cerrado ninguna calle en concreto, sino que estamos impidiendo la entrada a medida que se va moviendo la protesta", ha explicado a Efe un portavoz de la Policía de Nueva York, que ha detallado que para acceder a las vías colindantes al mercado de valores se está requiriendo una identificación que certifique que se trabaja allí. El elevado número de agentes en los alrededores de Wall Street ha permitido que la bolsa iniciara sus cotizaciones como cada día.

"Hoy es un día de celebración, un recordatorio de lo fuerte que es este movimiento", ha explicado a Efe una portavoz de Occupy Wall Street, Senia Barragan, que ha cifrado en 1.500 las personas que por ahora están concentradas en el sur de Manhattan para protestar "contra el sistema financiero y en defensa del 99% de la población".

Hoy hemos conocido el dato de que la prima de riesgo española roza los 500 puntos, la más alta hasta ahora. El catedrático de Política Económica de la Universidad de Barcelona, Antón Costas Comesaña, ha asegurado que en la situación en la que nos encontramos "no basta con que cada país haga sus deberes", como ha dicho Merkel, "además es necesario que desde el centro de Europa, en particular Alemania y Holanda, se tire de la economía". Es decir, España tiene que tener más abstinencia y trabajar más y mejor "pero tenermos que poder venderle lo que producimos a alguien y para poder hacerlo, ese alguien, Alemania, tiene que tener más demanda y eso es lo que no ve Merkel y es papel que tiene que hacer a corto plazo el Baco Central Europeo" (17/11/11).

El 7% de interés en la emisión de deuda a diez años del Tesoro es un nivel "realmente peligroso" porque supone pagar casi un tercio más que en la útlima subasta y nos sitúa en la zona de turbulencias en la que Grecia, Irlanda y Portugal tiraron la toalla.

Lo peor es que un interés del 7% acaba por afectar la economía real, es decir, los intereses que pagan las familias y las empresas por un nuevo crédito se encarecen.

La restricción del crédito hace que las expectativas de crecimiento se hundan y se aleja aún más la posibilidad de estimular la recuperación en un círculo vicioso que se conoce como la trampa de la deuda.

Los analistas y los políticos están empezando a pedir al BCE que se deje de melindres y compre bonos de forma masiva, ya que los Tratados de la UE lo permiten, lo único que prohíben explicítamente es que la entidad que preside Mario Draghi acuda directamente a las subastas de deuda de los Estados, en el mercado primario, no en el secundario.

Alemania interpreta que la entidad emisora no puede hacer compras masivas, pero es solo una interpretación y además entre sus mandatos el BCE debe salvaguardar la estabilidad de la zona euro.

En el fondo de lo que se trata es que la crisis de deuda lleva a una redistribución de la riqueza y por tanto del poder, que a Alemania y sus socios "virtuosos" como Finlandia les interesa sacar tajada en un rediseño de la eurozona con nuevas reglas.

Francia, sin embargo, si que ve con buenos ojos una intervención más activa del BCE ya que su prima de riesgo ha superado los 200 puntos básicos y eso pone en peligro, su triple A, la máxima calificación financiera.

Esperemos que el BCE intervenga con toda la artillería y meta en cintura a los mercados. El riesgo moral es que si el BCE defiende a los Estados en apuros, y acaba con la estrategia del palo y la zanahoria, estos no se vean obligados a reducir el déficit.

Alemania argumenta que el riesgo de bonos puede disparar la inflación, pero esto no ha pasado ni con la Reserva Federal, ni con el Banco de Japón que si que han comprado deuda. Además el BCE ha esterilizado los bonos obligando a los bancos a aumentar sus reservas.

Hay que recordar a los alemanes que Hitler no llegó al poder por la hiperinflación de 1939 sino por las severas medidas de ajuste de 1930.