Enlaces accesibilidad
arriba Ir arriba

En la pequeña aldea de Aroura, a unos 20 kilómetros al norte de la localidad de Ramala, en la Cisjordania ocupada, el rezo de la mezquita se escucha con fuerza a medio día.

Justo al lado del templo se encuentra la casa familiar en la que nació Saleh Al Arauri, el número dos de la oficina política del grupo islamista palestino de Hamás y que fue asesinado hace poco más de 24 horas en un atentado en el sur de Beirut, Líbano, en un ataque que se atribuye a un dron israelí. Allí la sensación es de luto y tristeza.

En el patio de la casa los familiares reciben las condolencias de vecinos y gentes de otras aldeas y pueblos que llegan hasta la aldea por las estrechas y serpenteantes carreteras palestinas. La vivienda de Aroura es un continuo entrar y salir de gente en medio del recogimiento y el silencio por la muerte de Al Arauri.

Día de luto en la casa familiar de Saleh al Aruri, número dos de Hamás, que resultó muerto hace unas horas en un atentado en Beirut. Numerosas personas acuden a dar las condolencias a su madre

Informa Fran Sevilla, enviado especial de RNE

El bombardeo de un dron israelí en Beirut, capital de Líbano, ha matado al número 2 del grupo terrorista Hamás. Un día después de que el Supremo anulase una de las leyes de la reforma judicial de Benjamin Netanyahu. Analizamos todo con Mario Sznajder,  Doctor en Ciencia Política y Profesor Emérito de la Universidad Hebrea de Jerusalén

Estados Unidos ha derribado dos misiles balísticos lanzados desde Yemen por los rebeldes hutíes. El ataque ha sido en el Mar Rojo e iba dirigido a un barco con bandera de Singapur con destino Israel. Según la armada estadounidense, han hundido también tres embarcaciones de los atacantes, que habrían muerto. En Gaza, continúa la guerra entre Israel y Hamás, mientras que el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, ha hecho cambios en su gobierno de coalición. El ministro de Exteriores ha pasado a ser el de Energía y este, a su vez, es el nuevo titular de Exteriores. Foto: Imagen de archivo de un buque. Mass Communications Spc. 2nd Class Moises Sandoval/U.S. Navy via AP

La joven francesa Mia Shem, que permaneció secuestrada 54 días por el grupo islamista Hamás tras el ataque terrorista del 7 de octubre ha contado en la televisión israelí cómo lo vivió. Ella se encontraba en un festival de música en el sur de Israel cuando entraron los milicianos y secuestraron a decenas de personas. "Tenía que tomar la decisión de quedarme o morir allí quemada, me dije a mí misma, no quiero morir, que Dios me proteja, cuando llegamos me dijo, "bienvenida a Gaza", tardé tiempo en darme cuenta de que era una rehén de Hamás", ha relatado. Durante los días de cautiverio, según ha asegurado, no durmió porque tenía el temor de que la violaran y por eso, dice que intentó "conectar con el secuestrador en un nivel de amistad". Mia fue liberada durante la tregua entre Israel y Hamás.

En el mundo hay, actualmente, ocho grandes guerras activas, así como decenas de conflictos armados. Los expertos apuntan a que se ha producido un aumento de los conflictos desde comienzos del siglo XXI, sobre todo, a partir de 2010 con las primaveras árabes, el declive de la hegemonía estadounidense y la llegada de un mundo multipolar, con potencias emergentes como China. Además de la guerra en Ucrania y Gaza, a menudo más mediáticos, también se registran guerras en Burkina Faso, Sudán, Yemen, Somalia, Nigeria y Siria. Foto: EFE/EPA/ATEF SAFADI

Los bombardeos isrelíes en Gaza han reducido a escombros muchos de los edificios de La Franja, atrapando a civiles palestinos en su interior. En muchas ocasiones, se tratan de niños, que tras sobrevivir al impacto, deben ser trasladados a contra reloj a los hospitales más cercanos por las graves heridas. La atención médica, sin embargo, es limitada - denuncian los gazatíes -, ya que apenas queda espacio en los centros médicos ni hay medicamentos. Muchos de los pequeños, además, sufren la pérdida de sus padres o familiares más cercanos, lo que dificulta la recuperación posterior. Foto: AFP