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La Asociación Unificada de Guardias Civiles, la mayoritaria, denuncia en un comunicado las condiciones de su trabajo en Melilla. También pide al Gobierno un protocolo escrito para tratar a los inmigrantes irregulares que intentan saltar la valla. De las denuncias de maltrato a los inmigrantes que hacen las ONGes, reconocen que son acciones un tanto desmesuradas pero no una práctica habitual.  

En Tarifa, la Guardia Civil ha empezado a llevar a comisaría para su identificación a los cerca de mil inmigrantes que han llegado esta semana en pateras y que hasta el momento han estado alojados en polideportivos, se han llevado a cabo más de un centenar de traslados, la mayoría de mujeres. A los que sean identificados se les abrirá un expediente de devolución. En torno a 600 inmigrantes continúan alojados en dos polideportivos, asistidos por la cruz roja y la Guardia Civil. Varias ONGs están colaborando además en el reparto de alimentos.

Tres días después siguen durmiendo en el suelo de un polideportivo en Tarifa, la mitad de los inmigrantes que llegaron el martes se encuentran ya en centros de internamiento o de acogida, pero aún quedan según la Cruz Roja unos 500 por realojar. En el polideportivo ya no hay niños porque realojar a las familias ha sido la prioridad. Y ahora se trabaja para que los centros de las ONG puedan hacerse cargo del resto, pero muchos están también saturados. Mientras los inmigrantes hacen cola como cada día  para recoger la comida que les da la cruz roja y también algunos vecinos que de forma voluntaria se acercan a ayudar. 

La niña que llegó sin sus padres a Tarifa en una de las pateras rescatadas por Salvamento Marítimo se encuentra ya con una familia de acogida, debido a su corta edad. Mientras, los más de un millar de personas que han sido acogidas en polideportivos, están siendo trasladados a otros centros de la península. Una niña que llegó sin padres se encuentra ya con una familia de acogida, por la corta edad de la pequeña. 

Por tercer día consecutivo se produce un intento de entrada masiva a la Ciudad Autónoma de Melilla. Pero este último ha sido el menos numeroso de los tres. Unos 250 inmigrantes han intentado saltar el vallado.