Enlaces accesibilidad
arriba Ir arriba

Irán intensifica los esfuerzos diplomáticos para lograr la liberación del grupo de iraníes secuestrados en Siria por los rebeldes. El secretario del Consejo Supremo de Seguridad Nacional se ha entrevistado hoy en Damasco con Bachar Al Asad. Mientras en varios puntos del país se lucha encarnizadamente

Israel ha realizado su propio homenaje a las víctimas de la matanza de los Juegos Olímpicos de Múnich de 1972, después de que Comité Olímpico Internacional ( COI) se haya negado a honrarlos de forma oficial la Ceremonia Inaugural en Londres. Once atletas israelíes murieron ese año durante el asalto del grupo palestino Septiembre Negro.

El presidente sirio, Bachar al Asad, ha reaparecido este martes en unas imágenes en las que ha recibido al secretario del Consejo Supremo de Seguridad Nacional de Irán, Said Jalili, tras el reciente secuestro de 48 iraníes en las afueras de Damasco. La televisión oficial siria ha mostrado las imágenes del gobernante junto con Jalili, al día siguiente de que fuera anunciada la destitución del primer ministro sirio, Riad Hiyab, que, según los grupos opositores, ha desertado del régimen.

Las fuerzas del régimen sirio y los rebeldes protagonizaron hoy intensos enfrentamientos en el corazón de la ciudad septentrional de Alepo, así como en otras localidades del país, informan activistas opositores, después de que en la víspera medios oficiales informaran de la destitución del primer ministro sirio, Riad Hiyab, cuyo paradero sigue siendo un misterio.

Ocho personas han muerto y otras cinco han resultado heridas cerca de la capital afgana, Kabul, en un atentado contra un minibus que la Policía del país ha atribuído a grupos talibanes.

"Una mina activada a distancia ha afectado a un minibus civil en el distrito de Paghman en torno a las cinco de la madrugada" (las 2,30 hora española), ha explicado el jefe de la Policía de Kabul, Ayub Salangi, a la agencia France Presse.

Hace solo unas horas Riyad Hijad era todavía el primer ministro del país. Ahora, ha huido a Jordania para unirse a la oposición porque asegura que lo que está ocurriendo en Siria es un genocidio. Junto a él, que tomó posesión en junio, han desertado, al parecer, otros dos ministros y varios oficiales. También la pasada noche han llegado a Turquía un general del ejército, y van 31, acompañado de cinco militares de alto rango y más de treinta soldados. Es una prueba más de que el régimen se desmorona, asegura el opositor Consejo Nacional Sirio. Mientras, los rebeldes siguen asestándole nuevos golpes, como el atentado hoy contra la sede de la radiotelevisión oficial, enclavada en uno de los barrios supuestamente más protegidos de Damasco. Ha habido varios heridos, aunque se desconoce su gravedad. El ministro de información sirio ha acusado a Turquía, Catar, Israel y Arabia Saudí de ser los responsables políticos del ataque.

Atacado por un supuesto comando yihadista en el incidente más grave que ha ocurrido en la zona fronteriza. Después de la masacre, los asaltantes intentaron huir por la frontera con Israel, pero se encontraron con el ejército israelí.