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La liquidez de Grecia no va más allá de octubre. Lo admitía esta mañana su secretario de Estado de Finanzas al reconocer que las arcas del Estado heleno solo tienen fondos para afrontar el pago de los salarios públicos y de las pensiones a un mes vista. De ahí que a nadie haya extrañado el que el primer ministro, Yorgos Papandreu haya comparado la situación de su país con un estado de guerra. La última bomba estallaba ayer por la tarde cuando el Ejecutivo griego, reunido de forma extraordinaria, decidía habilitar un nuevo impuesto sobre todas las propiedades inmobiliarias, con el que se quieren recaudar 2.000 millones de euros. Papandréu intenta convencer hoy a su grupo parlamentario para que apoye esta nueva vuelta de tuerca. No lo tendrá fácil, como tampoco será sencillo convencer a los técnicos de la 'troika' comunitaria, que el miércoles regresan a Atenas, de la firme voluntad de Grecia de asumir sus responsabilidades en la lucha contra el déficit y la deuda. Solo así, Bruselas aceptará librar el sexto tramo de la ayuda acordada hace año y medio, 8.000 millones de euros, imprescindibles para alejar, aunque sólo sea momentáneamente, el riesgo de quiebra.

Una medida de urgencia que exhibe ante Europa un esfuerzo por asumir el plan de rescate, después de un fin de semana de especulaciones. La reacción a los ajustes griegos. Pero el próximo reto es el 29 de septiembre. Para Atenas hay 160 mil millones, un segundo tramo de ayuda. Dependen, sobre todo, de la aprobación germana. Merkel quiere ampliar el rescate... cuenta con el sí de la oposición socialdemócrata. Una postura europeísta, la de la canciller, que podría costarle algunos apoyos en su propio partido.

Sorpresa por La dimisión del economista jefe del Banco Central Europeo, el alemán Juergen Stark, lo que repercutió en todas las Bolsas, que terminaron la semana en caída libre. Stark era contrario a que el Banco Central Europeo comprase bonos de España e Italia.

Tras dos jornadas de subidas, miércoles y jueves, las bolsas europeas han cerrado la semana con un serio correctivo. El principal indicador de la Bolsa española, el Ibex-35, ha sido uno de los peor parados en el Viejo Continente, con un desplome del 4,44%, con lo que ha perdido los 8.000 puntos (7.910,20). La cuarta mayor caída del año ha dejado al principal indicador del parqué español en niveles de marzo de 2009, los mismos a los que llegó este pasado martes. La Bolsa española ha cerrado su segunda peor semana del año en la que ha caído el 6,54%, en tanto que las pérdidas acumuladas desde enero crecen al 19,77%. En el parqué madrileño todos los valores cerraron en negativo. Además, la prima de riesgo de España ha repuntado con fuerza hasta los 340 puntos básicos (desde los 317 de la apertura). El resto de mercados europeos han acabado la última sesión de la semana con grandes caídas. La peor, la de la Bolsa de Milán, que se ha derrumbado un 4,93%. Pérdidas muy importantes han sufrido el resto de índices: Fráncfort ha cerrado con un descenso del 4,04%; París, un 3,6% abajo; Londres, un 2,35%; y Lisboa, un 2,5%. Atenas, sin embargo, ha subido un 0,47%.

En Navarra se han concentrado en las puertas de los colegios. Y en Santiago de Compostela miles de docentes se han manifestado para protestar por los recortes de la Xunta de Galicia.

Muere Ruiz Mateos. El nuevo propietario es Back in Bussiness -algo así como "de vuelta a los negocios"- una sociedad que se dedica a liquidar empresas en apuros. Su presidente es Ángel de Cabo, el empresario que el año pasado compró Viajes Marsans -que hasta entonces co-presidía Gerardo Díaz-Ferrán-. 

El comprador podría pagar hasta 1.500 millones de euros, es decir, la suma de las deudas de todas las empresas. Dividirán el grupo y buscarán fórmulas para reflotar los distintos negocios. La familia Ruiz-Mateos asegura que ha "aceptado" la oferta porque garantiza la mejor alternativa posible para trabajadores, proveedores y clientes de las empresas de Nueva Rumasa. 

Planes de ajuste, agencias de calificación, prima de riesgo, rescate económico... Diez años después, el terrorismo islamista ha quedado en segundo plano. El asunto estrella es la crisis. El 11-S no la causa. Los atentados significaron un retroceso de las libertades en todo el mundo. Democracias y también regímenes tiránicos endurecieron sus leyes antiterroristas. Con ellas en la mano, en estos años unas 120.000 personas han sido detenidas, y 35.000, condenadas por terrorismo, ha calculado la agencia Associated Press.

Tras dos jornadas de subidas, las bolsas europeas vuelven a la senda de los números rojos este viernes arrastradas por Wall Street, las imprecisones de la Reserva Federal y las continuas rebajas de crecimiento de la economía mundial realizada en los últimos días por la OCDE y el BCE. El principal indicador de la bolsa española, el Ibex-35, lideraba las pérdidas en el Viejo Continente, con una caída del 2,10%, lo que le mantenía en el nivel de los 8.100 puntos. Además, la prima de riesgo de España ha repuntado con fuerza hasta los 327 puntos básicos (desde los 317 de la apertura). El resto de mercados europeos sufrían también a esta hora importantes descensos, del 1,67% en Milán, del 1,41% en París, del 1,17% en Fráncfort, del 0,83% en Londres, y del 0,68% en Lisboa. Atenas, sin embargo, subía un 2,02%.

Los países desarrollados deben actuar "ahora y con valentía" para impulsar sus economías, ha declarado este viernes en Londres la directora ejecutiva del FMI, Christine Lagarde, horas antes de la reunión del G7 en Marsella.

"El mensaje principal que quiero transmitir es que los estados deben actuar ahora y actuar con audacia" porque la economía mundial "atraviesa una fase llena de peligros", ha explicado Lagarde en un discurso en el Instituto Chatham House. La semana pasada, unas declaraciones similares de la francesa provocaron una caída en las bolsas y las llamadas a la calma de varias autoridades económicas.

Lagarde ha acogido favorablemente el plan para el fomento del empleo que el jueves presentó el presidente de Estados Unidos, Barack Obama. "Damos la bienvenida a las propuestas de Obama, que se centran en apoyar el crecimiento y la creación de empleo en el corto plazo", ha subrayado.