El grupo islamista Hamás ha anunciado este miércoles la muerte de su líder, Ismail Haniyeh, en un ataque atribuido a Israel en Teherán (Irán), donde se encontraba de visita oficial.
La redada israelí que acabó con la vida de Haniyeh tuvo lugar en la residencia del líder en Teherán, en la que se encontraba tras participar en la ceremonia de investidura del nuevo presidente iraní.
La Guardia Revolucionaria de Irán ha confirmado el asesinato y está investigando el ataque, aunque Israel no ha confirmado el ataque ni la muerte de Haniyeh.
Hamás confirma la muerte de su líder, Ismail Haniyeh, tras un ataque en Teherán, donde se encontraba de visita oficial para asistir a la toma de posesión del nuevo presidente iraní. Hamás señala directamente a Israel como responsable de esta muerte y asegura que no quedará impune. Carlos Echevarría Jesús, profesor de Relaciones Internacionales de la UNED, señala que esto es un "paso más en un calentamiento acelerado que se está produciendo" y que están por ver cuáles serán las consecuencias de este asesinato. Ismail Haniyeh en los últimos tiempos se había implicado en las negociaciones para un posible alto el fuego en la Franja de Gaza, sin embargo, Carlos Echevarría Jesús recuerda que este perfil como negociador "no nos debe llevar al engaño": "Era el líder de lo que se califica como brazo político de Hamás y no olvidemos que Hamás, para nosotros, para la Unión Europea, es una organización terrorista". Por tanto, dice que la situación, que ha ido escalando en estos meses, es grave: "No olvidemos a los yemeníes, a Hizbolá. Pero hay otro escenario preocupante: China entrando en la partida, Estados Unidos en un momento delicado ante las elecciones que se presentan en el horizonte".
Un ataque israelí contra una escuela en el centro de la Franja de Gaza ha matado al menos a 30 personas y ha herido a un centenar. En la escuela se refugiaban desplazados de otras áreas de Gaza y operaba un hospital de campaña. El Ejército israelí ha intensificado sus ataques también en el sur de la Franja, donde ha ordenado de nuevo la evacuación forzosa de barrios de la ciudad de Jan Yunis.
Desde hoy, los judíos ultraortodoxos de Israel están obligados a realizar el servicio militar. Pueden ser llamados a filas tras un fallo histórico del Tribunal Supremo. Hasta ahora, estaban exentos. La decisión ha generado una fuerte polémica y el rechazo entre rabinos y jaredíes.
El campo de refugiados de Al Mawasi, entre Jan Yunis y Ráfah, había sido declarado como una zona humanitaria por Israel. Hasta allí habían llegado miles de gazatíes desplazados de otras partes de la Franja. Algunos supervivientes han explicado que han sido siete u ocho misiles los que han impactado en el campo de refugiados. Israel asegura que su objetivo eran mandos de Hamás, incluido el líder de su brazo armado.
Más de 70 personas han muerto y unas 300 han resultado heridas tras un bombardeo israelí contra Mawasi, declarada "zona humanitaria" por los propios militares israelíes, al oeste de la localidad de Jan Yunis, en la Franja de Gaza, según el ministerio de Sanidad de Gaza, controlado por Hamás. El objetivo del ataque israelí era Mohamed Deif, el comandante de las Brigadas al Qasam, brazo armado de Hamás.
Las negociaciones para un alto el fuego continúan sin visos a alcanzar un acuerdo. Hasta el momento, solo ha habido un cese de las hostilidades en todo el conflicto, y que apenas duró una semana. Israel y Hamás negocian de manera indirecta a través de la mediación de Egipto, Catar y Estados Unidos. La renuncia de Hamás a un alto el fuego permanente ha permitido que el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, envíe a sus negociadores, pero continúa imponiendo líneas rojas. Los más radicales han advertido al mandatario que "lo harán caer" si firma la paz con Hamás, mientras que los medios de comunicación del país señalan que el propio Netanyahu boicotea los procesos para alcanzar un alto el fuego satisfactorio.
El grupo islamista Hamás ha dicho que acepta negociar la liberación de los rehenes aunque no haya un alto el fuego permanente, algo que venía reclamando hasta ahora. Se calcula que unas 116 personas están cautivas en Gaza desde los atentados que sorprendieron a Israel el 7 de octubre. Aquel ataque, con 1.200 muertos, ha traumatizado a la sociedad israelí, que es incapaz de recuperar la tranquilidad y que pide aniquilar a Hamás.
Fueron los peores atentados que ha sufrido Israel en su historia. Los terroristas mataron a 1.200 personas en una veintena de kibutzs cercanos a la Franja. A partir de ese 7 de octubre comienza una guerra que dura ya nueve meses y que no tiene visos de terminar. No hay rincón de la Franja que Israel no haya atacado. Los muertos superan ya los 38.000, la mayoría civiles.
Foto: Soldados israelíes en el sur de Gaza (EFE/EPA/Ohad Zwigenberg)