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El Cantábrico y el Atlántico se funden frente a Cabo Ortegal, abrazando los tres islotes dos Aguillóns. Esta pequeña península, al noroeste de Galicia, es uno de los lugares más singulares de la costa Ártabra. Emprendemos una ruta que empieza en el pueblo de Cariño y llega a Ortegal después de pasar por varios miradores y una ermita.

Desde hace días, un dispositivo del Ministerio de Transición Ecológica y la Junta de Andalucía buscan en el Estrecho de Gibraltar a un cachalote. Está atrapado en una red que le envuelve todo el cuerpo y se teme que no sobreviva. "Toño", que es el nombre por el que lo conocen los biólogos marinos, vive en esas aguas desde hace años.

Este es el relato de mi visita a las entrañas de la tierra, a varios cientos de metros de profundidad, donde yacen grandes cantidades de sal en lo que sin duda fue el fondo de un océano. Para que nos ilumine sobre los misterios geológicos de la minería me acompaña Catia Barrados, una geóloga que conoce como nadie los laberintos de la mina de sal de Loulé.

Agentes y buzos de la Guardia Costiera italiana han liberado a un ejemplar joven de cachalote que flotaba frente a las aguas de las islas Eolias, cercanas a la costa norte de Sicilia. La ballena había sido avistada por una ONG local Filicudi, que avisó a la policía. Los buzos del servicio de salvamento marítimo italiano comprobaron que tenía la cola enredada en varios metros de red, lo que le impedía moverse y desplazarse. Tras dos horas de trabajos para cortar la maraña de redes, el ejemplar quedó en libertad y salió en búsqueda de la manada que le acompañaba. Según Filicudi, las redes proceden de la pesca ilegal de pez espada y atún.

Preocupación en Francia por la aparición de delfines muertos en la costa noroeste del Atlántico. Las autopsias practicadas a los ejemplares muertos revelan cortes y fracturas en la cola la aletas laterales, lo que hace sospechar a los biólogos marinos que muchos de estos ejemplares han quedado atrapados en redes de pesca o han podido ser mutilados antes de volver a ser liberados en el mar.

El 5 de octubre de 1804, la fragata de la Armada Española Nuestra Señora de las Mercedes, que cubría la ruta comercial entre las colonias de América y España, había partido de Montevideo dos meses antes y estaba a punto de llegar a España. Provenía inicialmente del puerto del Callao en Lima, Perú, e iba cargada con oro, plata, telas de vicuña, quina y canela.  Estas fragatas estaban constantemente amenazadas por navíos del Reino Unido, pero Francia, España y Reino Unido habían suscrito 4 años antes el Tratado de Paz de Amiens. Ese día, la Marina Real británica lo rompió cuando hundió a cañonazos la fragata a 30 millas náuticas del cabo de Santa María de Portugal. Murieron más de 250 tripulantes y medio centenar de supervivientes fueron hechos prisioneros. Mientras todo eso sucedía, un gran cargamento de oro, plata y cobre se hundía en el mar a unos 1.130 metros de profundidad. 

En 2007, la compañía cazatesoros Odyssey Marine Exploration expolió 600.000 monedas de la carga, aunque España litigó en Estados Unidos hasta que terminó recuperándolas. Pero ahí abajo no solo había monedas. Los investigadores españoles sabían que a más de un kilómetro de profundidad había vestigios de cómo era la vida de los españoles a principios del SXVIII. Y en 2014, el Museo Nacional de Arqueología Subacuática, el ARQUA, con su director Iván Negueruela a la cabeza, inició un proyecto para que España acometiese lo nunca hecho por otro país: excavar científicamente un pecio sumergido a esa profundidad. Han contado con la ayuda del Instituto Español de Oceanografía y la Armada como institución observadora.

Iván Negueruela, director del Museo Nacional de Arqueología Subacuática, ha comentado, en el programa 24 horas de RNE, que el mayor reto fue coordinar las acciones para bajar a tal profundidad. “Lo peor fue convencer a jefes políticos de ministerio de Cultura y del Instituto de Oceanografía de que aquello se podía realizar, después fue fácil”. Negueruela ha declarado que fue muy emocionante descender hasta el pecio y comprobar los “destrozos” que había realizado el Odyssey. “Estos señores solo quieren lo que pueden meter en internet, que son las monedas de plata”, ha sostenido. El director del Museo Nacional de Arqueología Subacuática ha destacado que hay “un antes y un después” de las campañas en el pecio de Nuestra Señora de las Mercedes, tanto por la profundidad como por la técnica utilizada.

El Oceanografic de Valencia es el acuario más grande de Europa. Y uno de los más visitados. Pero es mucho más que un reclamo turístico. El equipo multidisciplinar que dirige Eduardo Nogués también investiga y publica sus conclusiones científicas.

La oceanógrafa y astronauta, Kathy Sullivan, suma un nuevo hito a su historial de expediciones a lugares remotos. Junto a la empresa que investiga los fondos marinos, Calandan Oceanic, Sullivan ha descendido en una cápsula submarina hasta uno de los lugares más profundos de nuestros océanos, el abismo Challenger en el Pacífico Sur. Con esta gesta la astronauta, que fue la primera mujer estadounidense en dar un paseo espacial en 1984, se convierte en una de los pocas personas que puede decir que ha estado en los más alto y en lo más profundo que cualquier humano haya estado jamás.

Salvador Fojón Polanco, el autor de "Biología Humana ¡ a ver si nos entendemos!", es un naturalista a la vieja usanza que igual se interesa por los fósiles del Pirineo, que por los insectos de su jardín o las algas del Atlántico.

En el “Tema Ciencia” conversamos con Manu San Félix, biólogo marino y National Geographic Explorer, sobre el estado de los océanos y su documental Salvemos nuestro Mediterráneo. Para él, “la salud del planeta es nuestra salud”.

El concepto de moda responsable toma presencia en la Semana de la Moda de Londres frente a la "moda rápida", barata y fácil de fabricar, pero que puede tener consecuencias devastadoras para la vida marina. Un estudio demuestra que en cada lavado la ropa puede desprender hasta 700.000 fibras de plástico que van a parar a los océanos, pero que también, según un estudio de la OMS, pueden terminar en el agua que bebemos.

  • Satélites europeos confirman que los océanos están aumentando más rápido de nivel cada año
  • La subida del mar fue de dos milímetros en 2000, tres milímetros en 2010 y casi cuatro milímetros alrededor de 2020

Colocar unas gafas de 3D a las sepias, utilizando velcro y pegamento, es la base de un experimento de la Universidad de Minnesota para investigar la visión de los depredadores en el mundo animal.

El principal objetivo del estudio era ver si las sepias tienen visión binocular tridimensional, similar a la de los humanos, que les permitiría poder calcular la distancia a la que está un objeto. Para ello realizaron varias pruebas comparativas con proyecciones de gambas, su presa típica.

Este tipo de experimentos, aunque parezcan extraños, sirven para mostrar cómo los cerebros de especies muy distintas se han desarrollado de maneras diferentes para llegar a soluciones similares, aunque adaptadas al entorno.

Esto ha explicado Antonio Martínez Ron en 24 horas con Antonio Delgado, que además ha explicado la gran inteligencia de las sepias, la diferencia con los calamares y pulpos y ha contestado a una pregunta candente: ¿tienen personalidad las sepias?