El Gobierno socialista ha cambiado por completo la orientación de las políticas exteriores desarrolladas por los dos gobiernos de José María Aznar. El europeismo de Zapatero frente al atlantismo de Aznar, el acercamiento a Marruecos y a Cuba y la concepción de la Alianza de las Civilizaciones son algunos de los hitos de la actuación exterior durante esta última legislatura. Todas ellas fueron iniciativas fuertemente criticadas desde el PP, que al inicio de la legislatura convirtió al ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, en uno de sus blancos preferidos hacia el que dirigir sus dardos. Saber más
Su programa electoral insiste en la defensa de la paz y en el desarrollo de la Alianza de Civilizaciones. Otras propuestas son destinar el 0,7% de la renta nacional bruta a ayuda al desarrollo, donar 240 millones de dólares en vacunas a los países menos avanzados y aprobar un Plan África 2008-2012.
Los populares proponen reafirmar la competencia exclusiva del Estado en política exterior y consensuar una estrategia nacional para la acción exterior, de la que el presidente del Gobierno responderá una vez al año ante el Congreso. Asimismo, abogan por destinar el 0,7% del PIB a ayuda al desarrollo y prometen a trabajar para incorporar a España al G-8.
IU rechaza el Tratado de Lisboa y propone que la Unión Europea se dote de una verdadera constitución. La coalición defiende el proceso de autodeterminación saharaui, exige el levantamiento de las sanciones contra Cuba y pide que el 0,7% del PIB se destine a la ayuda al desarrollo.
La coalición nacionalista reclama una mayor participación de Cataluña en las instituciones de la UE y se compromete a trabajar para que el catalán sea "una lengua plenamente reconocida en las instituciones europeas". También quieren destinar el 0,7% del PIB a ayuda al desarrollo.
Los independentistas proponen una "política exterior descentralizada" y defienden que Cataluña pueda convertirse en un miembro más de la UE, así como la oficialidad del catalán. ERC también recoge entre los puntos de su programa que el 0,7% del PIB se destine a la ayuda oficial al desarrollo.
El programa del partido nacionalista defiende que el País Vasco tenga una representación directa en las instituciones europeas. Además, aboga por reformar el modelo de elecciones al Parlamento Europeo, eliminando la circunscripción única.
La coalicióon canaria quiere establecer oficinas canarias en aquellos países considerados prioritarios para su acción exterior y defiende que la UE tenga en cuenta las singularidades de Canarias como zona ultraperiférica. También propone varias medidas para ampliar los derechos de los emigrantes españoles en el exterior.
El BNG propone profundizar en el derecho de los pueblos a autogobernarse, democratizar la ONU y el resto de organismos multilaterales y limitar la acción del Ejército a la defensa del territorio, por lo que pide retirar las tropas españolas de Afganistán y Haiti.
CHA se opone a la presencia de cualquier base militar y, en concreto, de la OTAN, en territorio aragonés. Asimismo, respalda la autodeterminación del Sáhara Occidental y la creación de un Estado palestino. En cooperación, apuesta por destinar el 1% del presupuesto a ayuda al desarrollo.
Como otros partidos nacionalistas, EA defiende que el País Vasco disponga de una representación directa en las instituciones comunitarias. También apoya la celebración del referéndum de autodeterminación del Sáhara y considera "imprescindible" que se aporte el 0,7% del PIB a proyectos de cooperación al desarrollo.
En la línea de otros partidos nacionalistas, reconoce el derecho de autodeterminación de las naciones y hace especial hincapié en el caso del Sáhara. También pide la presencia directa de Navarra en los distintos órganos de la Unión Europea.